ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Chikatilo


Enviado por   •  25 de Diciembre de 2012  •  4.314 Palabras (18 Páginas)  •  566 Visitas

Página 1 de 18

Andrei Chikatilo, el Ciudadano X.-Víctimas: 53Lugar: Ucrania.-

Andrei Romanovich Chikatilo nació el 16 de Octubre

de 1936 en Yablochnoye, un pueblo de Ucrania en la

entonces Unión Soviética. La niñez de Chikatilo fue

muy difícil dado que su padre había caído prisionero de

guerra durante la Segunda Guerra Mundial y su madre

se había encargado ella sola de sacar adelante lo que

quedaba de la familia, consistente en él y una hermana

7 años menor. En su infancia le tocó ver muy de cerca

las escenas de la guerra, los resultados de constantes

bombardeos alemanes dejaban una estela de heridos y

cadáveres regados en algunas calles. Esos cuerpos

asustaban al joven Chikatilo pero a la vez le provocaban

sobresalto y curiosidad.

No esta confirmada la real existencia de un hermano

mayor de Andrei Chikatilo sin embargo, de chico y para

controlarlo la mama le recordaba constantemente la

historia de su hermano quien había muerto en la

hambruna y unos vecinos se lo habían comido. Debido al proyecto Estalinista de colectivizar la

actividad agrícola, mucha gente había sido trasladada y los efectos de mediano plazo fueron la

quiebra de pueblos enteros y la hambruna. A pesar de que era probable que la gente mas

desesperada cometiera actos de canibalismo, no se puede confirmar si tal suerte le tocó al hermano

de Chikatilo, pero de que era una buena historia de terror, si que lo era. El chiquillo lo pensaba dos

veces antes de abandonar el patio de la casa donde vivían. También se sabe que en su infancia

Chikatilo orinaba la cama durante las noches, por lo cual era duramente reprimido y humillado por

su madre.

Una vez en custodia policial, Chikatilo declaró que de niño tenía una fantasía recurrente que

consistía en llevar a soldados alemanes al bosque para ejecutarlos. Esa era una fantasía común de la

niñez rusa durante la guerra. Pero la niñez de Chikatilo fue como con muchos otros asesinos

seriales, de soledad y aislamiento. Los demás niños se burlaban de su extraña forma de ser así que

desde niño comenzó a albergar fantasías de violencia y tortura contra sus semejantes. Su primera

experiencia de tipo sexual fue entre los 10 y 15 años cuando un día se abalanzó contra una amiga de

su hermana, ante el forcejeo de la muchacha para librarse de su abrazo, Chikatilo eyaculó. Esa

asociación entre un acto de violencia y la eyaculación quedó fijamente plasmada en su mente para

siempre.

Foto ya clásica del maniático Chikatilo sonriendo durante su juicio

Posteriormente es enroló en la armada para cumplir el servicio militar y de regreso quiso llevar una

vida como la de cualquier otro. Se consiguió una novia, pero llegado el momento no pudo efectuar

el coito y la muchacha se burló de él e incluso tuvo la ocurrencia de contar el chisme por todos

lados. Aquello era para arruinar la vida de cualquiera. Chikatilo fantaseaba encontrarse a solas con

la susodicha y hacerla pedazos en castigo por esparcir la información acerca de su impotencia.

Nunca pudo conseguir una erección, lo cual debió ser extremadamente frustrante. A pesar de ello y

gracias a los arreglos de su hermana, se casó en 1963 y tuvo una hija y un hijo. Tras eyacular

introdujo a mano el semen en la vagina de su mujer. Ni falta hace imaginar que aquel matrimonio

era de lo más desábrido de esta vida, con una mujer muy al estilo de su madre, Chikatilo no hacía

otra cosa que reforzar su apartado y enfermo mundo interior poblado de enojo y violencia que

aumentaba conforme transcurría el tiempo.

En 1971 Chikatilo obtiene un grado en literatura en un curso por correspondencia pues cuando

intentó entrar a la universidad fue rechazado.

Completamente opuesto a su mundo interior, por fuera Chikatilo era un hombre de apacible y

tímida apariencia. En su empleo como maestro de escuela elemental, jamás podía hacer valer por

completo su autoridad con los educandos. Ahí nació y cultivó su atracción por las mujeres

jovencitas. Ante los reportes de acoso las autoridades de la escuela hacían caso omiso. Cualquier

explicación o pretexto aplacaba los ánimos de los involucrados. Nadie tuvo la precaución de

ponerle un alto al pervertido Chikatilo que muy pronto escalaría un nivel más de violencia hasta

llegar al asesinato.

En 1978, como parte de su trabajo a Chikatilo lo envían a dar clases a un lugar llamado Shakhty.

Mientras el resto de su familia se muda, le queda mucho tiempo libre, mismo que dedica a ver pasar

a los jóvenes escolares por la calle. Entonces comienza a fantasear con ellos, que los tiene con él y

desnudos. Consigue un cuarto en una calle oscura y apartada a donde lleva a la niña de 9 años

Yelena Zakotnova. Incapaz de penetrarla utiliza su cuchillo como sustituto en el acto sexual.

Chikatilo tenía la idea de que en los ojos de la víctima quedaba impresa la imagen de su asesino, por

lo que a Yelena le tapó los ojos cuando la atacó a puñaladas y la estranguló. Después de su banquete

de violencia sexual, se deshizo del cuerpo en un río cercano. En este caso hubo quienes lo señalaron

como sospechoso. Testigos dijeron haberlo visto con la niña y a pesar de que en las puertas de la

cabaña se hallaron ligeras huellas de sangre, un sujeto de nombre Alexsandr Kravchenko fue

declarado culpable. Por un pelo se salvó Andrei Chikatilo de ser arrestado. Pero el asunto probó ser

muy delicado, puesto que años después de ser ejecutado aquel hombre fue oficialmente perdonado

por la muerte de Zakotnova. Antes de la detención del destripador de Rostov, muchos inocentes

cayeron en manos de la ineficiente policía rusa que con métodos y torturas de la edad de piedra le

sacaba confesiones a quien fuera.

Aspecto exterior del cuartucho donde Chikatilo cometió su primer crimen

La docencia infantil no fue el único empleo de Andrei Chikatilo, frecuentemente cambiaba de

empleo. Hasta en la planificada sociedad comunista de aquellos días en la Unión Soviética, había

cabida para sujetos como el asesino de esta historia que replicando el mismo patrón visto en

criminales occidentales, nunca se estacionaba en un buen empleo de una vez por todas, sino que iba

errante de un lado a otro, generalmente con un desempeño mediocre que lo obligaba a buscar nuevo

empleo muy pronto. Aunque también tomaba empleos

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (28 Kb)
Leer 17 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com