Condicionamiento Operante Refuerzo

Refuerzo

El reforzamiento es el proceso en el que se proporcionan consecuencias para la conducta que aumentan o mantiene la tasa de esa conducta. Charles Catania (1998) ha señalado que un procedimiento debe tener tres características para que se le pueda considerar como reforzamiento:

* Una conducta debe tener consecuencia.

* La conducta debe ir en aumento. (Por ejemplo, Debe ocurrir con más frecuencia)

* Su incremento debe ser el resultado de la consecuencia.

Existen dos tipos de procedimientos de reforzamiento

1. Reforzamiento Positivo: a una respuesta le sigue la aparición o el aumento en la intensidad de un estimulo. Este llamado reforzamiento positivo, por lo común es algo que el organismo busca obtener. No obstante, Skinner (1953) señalo que “la única característica que define a un estimulo reforzante es que refuerza” en otras palabras, un reforzador se define por sus efectos sobre la conducta a la cual sigue. El efector del reforzador positivo es fortalecer la conducta que lo procede. Por ejemplo, si un perro ladra y alguien le da un poco de comida, es probable que ladre de nuevo. En el reforzamiento positivo, a la ocurrencia de una respuesta (R) le sigue la parición de un estimulo reforzante (ER):

R ER

2. Reforzamiento Negativo: La respuesta se fortalece al eliminar o disminuir la intensidad de un estimulo, el cual se denomina reforzador negativo, por lo común algo de lo que el organismo trata de escapar o evitar. Por ejemplo, si un perro queda atrapado en una tormenta de granizo cuando esta en el exterior, es posible que escape de los golpes del granizo al pararse debajo de algún tipo de cobertizo. Si lo hace, es posible que la siguiente vez que comience a caer granizo busque un cobertizo. Se habrá reforzador su conducta. En el reforzamiento negativo, como en el positivo, a una respuesta le sigue alguna circunstancia reforzante, una que fortalece la conducta:

R ER

Castigo

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