¿Cómo disciplinar a un niño?

Propuestas de estrategias

• Para poder tratar con comprensión al niño y lograr una mejora en su falta de disciplina es necesario que la maestra asista a cursos, talleres y conferencias sobre desarrollo humano, para poder tratar de mejor manera al niño, y evitar excluirlo de sus actividades, ya que es necesario emplear amor, paciencia y comprensión.

• No descargar sobre el alumno el coraje o frustración que siente como educadora, castigándolo o reclamándole sus fallas, errores o mal comportamiento, sino que deben ser justos, pacientes y confiar en ellos y lo que pueden hacer. Sin embargo, se debe platicar con ellos sobre cuál es la consecuencia de sus actos, pero sin poner etiquetas como: “Eres un burro, malo…”, tampoco se les debe castigar, ni dañar su autoestima.

• Además, se le debe transmitir seguridad al niño, haciéndole ver que las equivocaciones que cometió solo le traerán cosas malas, pero si cambia su conducta le va a servir para estar bien y tener muchos amigos que quieran estar con él, porque va a saber respetar.

• Otra estrategia para lograr un cambio en la conducta del niño es disciplinar, no castigar, ya que al castigar le enviamos un mensaje al niño, el cual lo percibe como que se le aparta por ser considerado un inadaptado o antisocial. En cambio, si lo disciplinamos se le da un mensaje positivo, que puede interpretar como: “Te quiero y quiero que lleguemos a un acuerdo, sin molestar a nadie y respetar las reglas”.

Generar normas y límites, sin caer en la exclusión

• En ocasiones negarle al niño algo que le gusta, quiere o desea es favorable en su disciplina, debido a que le genera cierta frustración al no obtener lo que pretende, esto se hace con la finalidad de que aprenda que no todo se puede obtener y lo podrá hacer reflexionar acerca de lo que hizo para obtener esa consecuencia.

• Describir las normas y los límites continuamente de manera clara y precisa, esto con el fin de que los interiorice y los recuerde todos los días. Al aplicarlos hay que estar tranquilos y de buen humor. En caso de que el niño las incumpla se le debe imponer una sanción proporcional a la falta que cometió. Para proporcionarles las reglas es recomendable hacerlo por medio del juego, de manera divertida, pero sin dejar de ser firme.

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