De La Calle A Harvard

Tiene 29 años, hija de 2 adolecentes hippies sumergidos en las drogas y con un destino incierto, así fue como la vida ponía a Liz Murray en una situación muy complicada.

Cuando ella tenía 10 años de edad, sus padres enfrentaban una etapa terminal sumergidos por el consumo desmedido de drogas, ella recuerda la época donde tenía que comer cubos de hielo con su hermana o los días donde se repartían un tubo de pasta dental, para engañar al estomago.

La escuela para Murray nunca fue fácil, pues, cubierta de piojos y sucia, no era bien aceptada por sus compañeros, situación que tuvo que soportar durante sus años de estudiante, también la enfermedad de su madre, quien, sufría crisis a menudo, recuerda la joven, cuando tuvo que darle primeros auxilios a su mamá a causa del Sida que padecía.

Pese a todos estos problemas, el abuso de las drogas por parte de sus padres, la enfermedad y evidente decadencia que todo esto le había causado a ambos, Liz recuerda que sus padres siempre fueron cariñosos, y algo que su madre siempre le dejó muy claro y que asegura le ha servido en su vida: “Ya vendrán tiempos mejores”.

Y así fue, luego de todas las carencias, y de vivir en la calle y refugios, Liz Murray hoy puede ver la vida desde el lado opuesto, al graduarse de una de las universidades más importantes y exclusivas del mundo, Harvard.

Ahora, cuenta con orgullo a estudiantes de todo el mundo, el camino tan complicado que supone su historia, el como descubrió un mundo mejor, el día que su maestro de clases nocturnas la llevó junto a otros estudiantes a visitar harvard, luego de lo cual, se propuso estudiar ahí, y lo logró.

Fue una beca del New York Times lo que hizo posible que Liz Murray y sus excelentes notas pudieran ir a Harvard, terminar una carrera y ser un ejemplo para muchos jóvenes, historia que quise compartir con ustedes, y que espero, los inspire y sirva para creer en sus capacidades para lograr grandes cosas.

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