EL CIRCO DE LA MARIPOSA

EL CIRCO DE LA MARIPOSA

(Un análisis de película)

En este video se puede observar el cambio de paradigma, en tanto la evaluación de un sujeto no pasa por sus déficits, y sí se apoya en las capacidades. Este cambio se manifiesta especialmente en el recorte que se hace de un circo que muestra los déficit, las imperfecciones de los sujetos, éstos pensados como "fenómenos", “raros”, “personas” tratadas como objetos, expuestas para ser observadas como curiosidades sin esperar nada de ellos; y el otro circo, el de la mariposa, que se apoya en las capacidades, en las maravillas, en las fortalezas de cada uno, personas pensadas como activas con posibilidades de ser y de aprender.

En el circo de las mariposas se ofrece trabajo en base a capacidades únicas, que sobresalgan; es la mirada desde el paradigma de la diferencia y no del déficit, como pasaba en el circo anterior al cual Will pertenecía.

Se puede vislumbrar el logro de la autonomía cuando se le permitió a Will valerse de sí mismo por medio del conocimiento de sus propias capacidades (en base a la exploración de sus habilidades) en la escena del río cuando él pide que lo lleven a donde están todos nadando y nadie del circo lo ayuda. El Sr. Méndez le dice que él va a poder, lo que lo obliga a intentarlo una y otra vez. Esta exploración le permitió descubrir por ejemplo, que podía nadar y flotar en el agua como el resto del grupo.

También se expresa en la conducta del protagonista la forma en que ha sido tratado, lo que ha sido valorizado en él, en este caso su discapacidad, y como él condicionó su conducta en base a esa creencia, sin encontrar algo más preciado en él mismo para lograr ser, para poder incluirse en un grupo de pertenencia. (EN EL VIDEO: en las dos conversaciones, en la primera, Will insinúa que se agregue al nuevo circo su show, mostrarse como un “fenómeno”, y en la segunda, cuando Méndez le dice que lo que dice el presentador del primer circo cuando lo anunciaba es algo en lo que él creía.)

Se muestra como a través del reconocimiento del otro como sujeto en primer plano, dejando en segundo la discapacidad, se puede reestablecer la capacidad de deseo: un funcionamiento de la capacidad creadora, de avance, de generación de novedad, de transformación, que conlleva ventajas sociales, participación en la vida comunitaria y compromiso del individuo con su propia vida. Recién cuando Will se reconoce en la mirada del otro como sujeto, se permite a él mismo valorarse como tal y volver a desear, comienza a sentir la “necesidad”, el “deseo” del cambio.

Se le ofrece a Will un espacio donde explorar sus capacidades y potencialidades, motivando el uso de la autodeterminación. Cuando se tiene  la convicción interna de estar tomando las riendas de la vida para elegir y sostener aquello que se considera conveniente para la persona misma, aún ante la confrontación, se esta siendo autodeterminado.

Cuando Will ya está en el circo de la mariposa, se pueden pensar todos los cambios que ocurren a partir de que se lo reconoce como sujeto, y no como objeto, donde se puede sentir útil a partir de un quehacer que le es propio y que él puede realizar por sí mismo, mejorar en eso, y por el que es reconocido por los otros. Se puede pensar cómo, a medida que Will se apropia de un rol en el circo de la mariposa, puede reconocerse útil, se incrementa su autoestima, se afirma su identidad para sí y para los otros, se fomenta la interacción social, la percepción de los propios derechos y la capacidad para hacerlos valer (en relación a esto último, por ejemplo cuando Méndez le dice a Will que es un “maldito desde el nacimiento…un hombre…si se puede llamar así….a quien Dios dio la espalda”, repitiendo las palabras del presentador del primer circo, y Will lo para, le dice que no diga eso…)

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