El arte de la estratagema
Enviado por Vianney Carranza • 18 de Octubre de 2021 • Documentos de Investigación • 4.854 Palabras (20 Páginas) • 97 Visitas
El arte de la estratagema forma parte del mundo de los seres vivos basta observar a los animales y a las plantas para captar múltiples estrategias de supervivencia y estratagemas de defensa y ataque. La inteligencia y la creatividad aplicadas a la gestión estratégica de la vida forman parte de esa sabiduría que guía siempre los seres humanos en la consecución de sus propios objetivos, en la superación de sus propios límites y en la mejora de sus propias capacidades.
El arte de Metis astucia audacia y habilidad
Metis era la divinidad griega que representaba la astucia, la sagacidad y la capacidad de inventar estratagemas para obtener el máximo resultado con el mínimo esfuerzo.
En la antigua Grecia el arte de metis parte de un conjunto de estratagemas inferidas de la observación de las estrategias de algunos animales para capturar las presas o defenderse de los depredadores: El arte se desarrolló luego como habilidad específicamente humana para alcanzar los objetivos deseados.
Se recurría a trucos o artificios que permitieran superar los obstáculos cada vez que había que afrontar una situación aparentemente insuperable, como la navegación en aguas y corrientes peligrosas o la batalla contra un ejército mucho más numeroso.
En la antigua ciudad de Mileto se produjo un fenómeno extraño y espantoso, muchachas jóvenes y hermosas se suicidaban como empujadas por una fuerza obscura, debido a esto el gobierno de la ciudad decidió entonces pedir un consejo a un anciano sabio que vivía retirado en las colinas. Y esta indicación que se le dio al Consejo de la ciudad fue que de ahora en adelante el cuerpo de toda mujer o doncella suicida será expuesto, desnudo, hasta la putrefacción en la plaza del mercado. después de esto los suicidios cesaron de inmediato es decir la estratagema había tenido éxito.
El arte de Metis en una forma de conocimiento operativo que carecía de todo prejuicio fidelista o ideológico. Ulises Alejandro magno ambos caudillos heroicos y a la vez investigadores estudiosos son personajes que mejor representan esta tradición. Ulises se pierde precisamente a causa de su sed de saber, o sea, tras haber sobrepasado los límites del tranquilizador mar Mediterráneo para conocer el océano limitado. Alejandro magno encarna el espíritu del indicativo imprevisibles del conquistador que estudiaba a fondo al saber de los pueblos anexionados a su Reino y asimilaba lo mejor de él.
Por desgracia, el arte de Metis siguió prosperando como filosofía pragmática hasta el nacimiento del imperio romano, fue sustituido por la verdad absoluta de la filosofía platónica fe religiosa y ciencia se superponen la una a la otra sacrificando la sabiduría al dogma y la gran biblioteca de Alejandría, que simbolizaba esta tradición de conocimiento, fue quemada por los cristianos que la consideraban sacrílega.
El héroe sabio de la tradición griega es herético por excelencia, indómito, se encuentra ávido de conocimientos y es capaz de actos extraordinarios. Su genialidad a la hora de hallar vías de salida incluso en las situaciones más complejas reside precisamente en la habilidad para pensar y actuar más allá de lo normal. el genio no es otra cosa que la capacidad de observar la realidad desde perspectivas no ordinarias afirmó William James. Se le preguntó a Albert Einstein sobre cuál era la diferencia entre el genio y la inteligencia y él respondió: una persona inteligente cuando logra encontrar una aguja en un pajar se detiene satisfecha, en cambio el genio sigue buscando para encontrar una segunda, una tercera y si es posible, una cuarta.
El arte de la guerra: vencer con el mínimo esfuerzo
Se cuenta que durante la edad media un estratega militar chino, fue huésped de un príncipe europeo luego de su estancia tuvo ocasión de participar en calidad de huésped de honor en uno de los muchos torneos caballerescos. Se explicó que este combate funcionaba que cada príncipe se batía en un duelo combates y el equipo que ganará sería el vencedor.
El príncipe recibió una sugerencia por parte del maestro chino le dijo que hiciera que se enfrentarán a su tercer campeón con su primer campeón que él primero con su segundo y él segundo con su tercero, le dijo que perdería el primer encuentro, pero luego vencería a los otros dos, y fue así.
Es ahí donde se ilustra a la perfección la filosofía China de la estratagema decididamente menos heroica que la griega, pero porque es menos vistosa es por eso que resulta en algunos casos aún más eficaz.
El arte de la persuasión: inducir al cambio.
Aristóteles afirma que si quieres persuadir a tu interlocutor tienes que hacerlo utilizando sus mismos argumentos. saber persuadir significa concretamente inducir a cambiar de opinión y de conducta: un poder ambicionado desde siempre no sólo por los políticos y caudillos sino por todo el que quiera adquirir la habilidad de convencer a los demás en las negociaciones, en los negocios y en los asuntos amorosos.
El arte de la persuasión afecta también a la relación de cada uno de nosotros consigo mismo, esto es el modo como nos persuadimos para creer en algo o nos forzamos a percibir las cosas desde perspectivas distinto de respecto a las adoptadas anteriormente.
Es imposible no estar influido por la comunicación esto quiere decir que conscientes o no cuando interaccionamos con alguien estamos influyendo constantemente en él, del mismo modo que él nos influye a nosotros. De igual manera esto es válido cuando nos relacionamos con nosotros mismos en los momentos de reflexión o de emoción intensa. El arte de metis como el de la guerra y el de la persuasión fueron objeto de condena y de censura, durante muchos siglos suerte fue estigmatizado como prerrogativa de bribones y embaucadores.
Siempre se ha considerado que el arte de la persuasión es peligroso porque es un sutil y formidable instrumento de poder, que es mejor no entregar a las masas, sino tenerlo en manos de las élites que dirige la sociedad.
Las estratagemas esenciales: Surcar el mar a espaldas del cielo.
La primera de las 36 estratagemas seleccionadas sigue siendo hoy en día la esencia del pensamiento estratégico. Se debe desplazar la atención de los demás hacia otros detalles en nuestra actuación que sean poco relevantes pero capaces de distraerlos, Mientras a sus espaldas se realizan las acciones importantes.
En el arte de combatir se trata de la capacidad de engañar al adversario con movimientos que la obliguen a determinadas reacciones de defensa o de contraataque para luego así golpearle en el punto que ha dejado peligrosamente descubierto o bien utilizar una táctica indirecta. este arte consiste en distraer su atención de lo que es realmente importante o en hacer algo que parezca inocuo pero que produce grandes efectos.
La comunicación esto ocurre cuando se induce al interlocutor a prestar atención a aspectos irrelevantes de nuestras argumentaciones o bien a indicaciones que le obliguen a concentrarse en ciertos detalles mientras que se le convence de lo importante prestándolo como algo marginal.
Oliver Sacks explica el caso de un paciente suyo con graves lesiones neurológicas que le causaban graves problemas al caminar, lo que él hizo fue botar una pelota mientras le dirigía la palabra y el paciente seguía caminando mientras miraba los rebotes de la pelota tras ya haber recorrido varios metros, Sacks la advirtió el paciente que estaba caminando y éste se bloqueó y empezó a manifestar sus problemas. es aquí donde se demuestra que la que la mente distraída es capaz de hacer cosas que la mente atenta no puede ni soñar. y gran parte de los fenómenos de anestesia hipnótica se realiza desplazando la atención de la mente del sujeto a una parte del cuerpo distinta de la que hay que anestesiar. así el uso de esta estratagema para la superación de tales miedos patológicos se debe a la aplicación más elegante y eficaz utilizando técnicas inspiradas en ella es posible lograr que las personas afectadas por esos trastornos afronten situaciones hasta entonces impensables.
Dirigir la atención a la búsqueda del placer más que la renuncia permite auto engañarse, logrando así lo que hubiera sido imposible mediante un esfuerzo de voluntad.
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