El bien y el mal no existen si no hay libertad para desobedecer

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Erich Seligmann Fromm

(1900 – 1980)

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“El bien y el mal no existen si no hay libertad para desobedecer.”

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1. Contenido

Erich Fromm fue un destacado psicoanalista y filósofo humanista. Su teoría de la personalidad es una combinación de Freud y Marx. Para el autor el concepto de libertad fue uno de los principales elementos para determinar el desarrollo del individuo. Influenciado por el marxismo concibe a la libertad humana de la siguiente manera:

Posee un carácter dialéctico, por un lado, es un proceso de crecimiento de fuerza e integración, dominio sobre la naturaleza, del poder de su razón y, por otro lado, está individuación creciente significa un aumento paulatino de inseguridad y aislamiento y un sentimiento creciente de la propia impotencia. (Fromm, 1941 p. 56).

Según Fromm la libertad humana posee cualidades negativas, la independencia de restricciones figuran en ella; estas son las convenciones sociales implantadas por personas o la sociedad y tiene un carácter destructivo. Las  positivas son la noción de libertad como autorrealización.

Fromm (1941) considera que  “la libertad es una cualidad que todos los seres humanos poseen, sin embargo, es amenazante para algunos asumir esta cualidad, es por ello que cada quien decide asumir su libertad, rechazarla o cederla” (p.20). La decisión que tome cada sujeto depende de características individuales y del medio social donde se desarrolló, principalmente la familia.

Fromm describe dos tipos de familia no productiva: Familia simbiótica: La relación entre sus miembros es estrecha, no pueden desarrollar completamente sus personalidades por sí mismos; familia apartada: son poco afectivos, evitando tener contacto entre sus miembros, la relación es hostil (Seelbach, 2013, p.47).

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Cuando el sujeto rechaza  o cede su libertad, Fromm (1941)                              sugiere que  se generan “mecanismos de evasión: autoritarismo, (masoquismo-sadomasoquista); destructividad, (eliminarse uno mismo o a otros); conformidad,  (sentido de soledad renunciando a su individualidad)” (p. 174-219). Estos mecanismos surgen cuando la libertad toma una orientación de carácter improductiva o su característica individual es la necrofilia. [pic 5]

Fromm (1953) menciona que el carácter “se forma esencialmente por las experiencias de la infancia. Es modificable hasta cierto punto por el conocimiento de uno mismo y por nuevas experiencias” (p.65). El autor indica que el carácter tiene dos orientaciones: productivas, dirigido por la acción (trabajo productivo), sentimiento (amor, felicidad) y pensamiento (razón); y las improductivas son estrategias que no ayudan al individuo a acercarse a la libertad positiva o autorrealización.

Otro factor que determina la personalidad de cada individuo, según Fromm son  biofilia y necrofilia.

Biofilia es aquella que ama la vida, sus pensamientos y acciones se encaminan hacia la libertad y felicidad; la necrófila es aquella que ama la muerte, para este tipo de personas, la destrucción, violencia, agresión son parte importante de sus características, conductas y pensamientos.(Fromm,1964, p. 16).

La necrofilia es la combinación de tres fenómenos que Fromm (1966) “necrofilia, el narcisismo maligno y la fijación simbiótico-incestuosa a la que denominó síndrome de decadencia” (p.8). Estos trastornos de la personalidad se describen respectivamente: Odio a  la humanidad, racismo, belicismo (necrofilia); ensimismado, desprecia a los demás (narcisismo);  dependencia extrema a la madre o un igual (simbiosis incestuosa).

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