El instinto de la agresión del hombre y de los animales

El instinto de la agresión del hombre y de los animales tiene muchos aspectos en común, principalmente en casos donde los animales de la misma especie solo buscan luchar entre si al igual que los hombres, con respecto a esto se desglosan muchas dudas como cuales son las causas que conducen a dicho comportamiento, el conocimiento que debemos de tener para poder controlar esta acción y para esto se han realizado varias investigaciones por ejemplo con la agresividad de los animales se ha descubierto que no es nada perjudicial sino solo un instinto para su misma conservación o protección y las pautas del comportamiento que tienen dichos animales se modifican por cualquier cambio en su entorno, sobre esto hay un gran error donde se cree que esta reacción puede modificarse completamente conforme a aprendizajes pero no es así, ya que si esto se llega a reprimir durante mucho tiempo trae como consecuencia su incremento y provoca procesos de agresividad más profundos dejando en claro que el concepto de agresividad es solo un síntoma patológico de la cultura de cada especie, pero entre mas espontaneo sea se afirma que este instinto se convierte en algo más temible; siguiendo con la espontaneidad hay un objeto de investigación mejorada de “Descartes donde el tomaba esta espontaneidad como la consecuencia de la fuerza vital, cosa que nadie lograba saber que era exactamente pero aun así a él no se le ocurrió seguir observando detalladamente su comportamiento y medir valores de los estímulos que desencadenaban un modo continuo”. Este mismo ejemplo se manifiesta en los humanos y se observa en el llamado cólera o locura que suele apoderarse de un conjunto de hombres que al encontrarse en distintas situaciones no favorables van desencadenando la agresión y el comportamiento negativo las cuales llevan a sufrir fuertes reacciones, y cuando el hombre logra alcanzar el control en sí mismo y comprender lo que está pasando puede que surja un movimiento desviado a su comportamiento actual de agresión, esto con finalidad de mandar la agresión por vías que no lleven a un daño o de lo contrario descarga su sentimiento en algún objeto.

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