Elizabeth
Enviado por colores909 • 3 de Septiembre de 2012 • 348 Palabras (2 Páginas) • 520 Visitas
del análisis, se pudo observar gran culpa en la paciente (uno de los diques de la sexualidad neurótica), así como reproches generados a partir de un intento de retomar su vida, en el cual salió a una reunión social y a su regreso, el padre empeoró por lo que no volvió a hacerlo. Además, a partir de dicho conflicto, la representación erótica fue reprimida de la asociación y el afecto a ella adherido fue aplicado para reanimar un dolor corporal presente de manera simultánea. De esta manera, se deja ver el mecanismo de conversión con el fin de la defensa (conversión histérica), característico de la histeria. Así, el afecto se separa y se va al cuerpo, mostrando reproches que se reprimen debido a que se trata de una representación inconciliable (hiperintensa) que se genera a partir de una huella mnémica que tiene una gran carga para el Yo y que en este caso, es displacentera.
Luego de un tiempo de tratamiento la enferma le comunicó a Freud que había encontrado el origen del dolor en su muslo derecho: recordó que era el lugar donde el padre apoyaba su pierna para que ella le renovara las vendas.
Gracias a Elisabeth, Freud obtuvo un panorama de cómo se genera la histeria monosintomática ya que en la paciente, la pierna derecha le dolía cuando se producían recuerdos del cuidado a su padre, mientras que el dolor de la pierna izquierda le sobrevenía cuando se despertaban recuerdos sobre la hermana muerta.
Asimismo, Freud encontró un enlace entre los dolores y el “estar sentado”: Elisabeth relató una escena en la que ella fue a una colina a pasear, lugar que solía frecuentar junto con su cuñado con quien solía platicar muy a gusto, compartiendo gustos e intereses. De esta manera, Freud se dio cuenta que los pensamientos de Elisabeth se dirigían a su soledad y su deseo de llegar a ser tan feliz como su hermana lo era a lado de su marido. A partir de este suceso, ella regresó con fuertes dolores que esa misma tarde, le sobrevinieron de manera definitiva. Así, el Yo se
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