Ensayo Amores Altamente Peligrosos
Enviado por margarin1992 • 20 de Abril de 2015 • 3.310 Palabras (14 Páginas) • 1.864 Visitas
El objetivo que tiene este escrito de Walter Riso es aclarar las características que tienen varios estilos afectivos con los que sería mejor no tener ningún encuentro o relación, por tanto es una herramienta para aquellos que buscan mantener relaciones afectivas saludables y que sean realmente satisfactorias para el conjunto de la pareja.
El libro se desarrolla en ocho capítulos dentro de los cuales se describen cada uno de los estilos afectivos que el autor ha considerado pertinentes para ilustrar los modos disfuncionales de dar y recibir amor.
Al empezar a empaparme de esta espectacular lectura, observe una pregunta que me pareció interesante. ¿Por qué tanta gente elige a la persona equivocada o se enfrasca en relaciones tan peligrosas como irracionales? Bueno, el autor Walter Riso trata de orientarnos para que tengamos cuidado a la hora de elegir una pareja ya que no todas las relaciones afectivas son convenientes para nuestro bienestar. Nos guste o no, algunas maneras de amar son francamente insoportables y agotadoras, así tengamos instintos masoquista y vacación de servicio. Los modos de amar que se abarca en esta lectura son muy difíciles de abordar y tolerar, incluso para aquellos que están enamorados del amor, que padecen todo estoicamente. Nos vamos dando cuenta que escogimos a la persona equivocada cuando sientes que debes monitorear todo lo que dices porque tienes miedo de cómo la otra persona lo verá. Si tienes miedo de expresar tus emociones y opiniones abiertamente, hay un problema en la relación.
Otro aspecto de sentirte tranquilo es que no sientas que la otra persona está tratando de controlarte. Comportamientos que te controlan son signos de una persona abusiva. Hay una diferencia muy grande entre "controlarte" y "darte sugerencias". Una sugerencia está hecha para beneficiarte, un comentario que te controla está hecho para el beneficio del otro.
Cualquier cosa que te moleste sobre la relación debe ser hablada. Hablar sobre temas incómodos es la única forma de evaluar como los dos se comunican, negocian y trabajan unidos. A lo largo de la vida surgen dificultades inevitables.
El libro se desarrolla en ocho capítulos dentro de los cuales se describen cada uno de los estilos afectivos que el autor ha considerado pertinentes para ilustrar los modos disfuncionales de dar y recibir amor. La estructura que presenta el escrito es la siguiente:
En primer capítulo nos habla del Estilo Histriónico / Teatral, o bien, el amor hostigante. Una persona histriónica es aquella que está especialmente caracterizada por la vivencia de las relaciones afectivas. La persona marcada por esta tendencia suele ser bastante demandante de la atención y la aceptación de otras personas y para ello puede utilizar normalmente la seducción o el victimismo. Las personas con estas características generalmente tienen una buena capacidad para desenvolverse tanto social como laboralmente, y es más frecuentes en la mujer que en el hombre. En el continuo que va desde características hasta el trastorno histriónico de personalidad, los siguientes aspectos cobran mayor o menor intensidad:
Búsqueda constante de consuelo o aprobación Dramatismo excesivo con muestras de emociones exageradas
Susceptibilidad desmedida ante las críticas o la desaprobación Actitud de seducción inadecuada en cuanto a su apariencia física o su comportamiento
Preocupación excesiva por su apariencia física Necesidad de ser el centro de la atención (egocentrismo).
Toda seducción y romanticismo tiene su lado antipático ya que las estrategias utilizadas para atraer y reclutar amores cambian con la historia y las costumbres. Es evidente que la pesca amorosa no es la misma hoy, en plena posmodernidad, de lo que fue en la edad de piedra o cuando Ovidio escribió El Arte de Amar. Sin embargo, todo hace pensar que la dinámica que se esconde detrás de la conquista sigue siendo la misma. No importa de qué hechizo o anzuelo se trate; si la pasión y el romanticismo se fusionan en su justa medida no hay cuerpo que resista ni corazón que contenga. Cuando se da una pasión romántica o un romanticismo apasionado el impacto es definitivamente irresistible.
Parece evidente que la capacidad seductora no es un indicador de a propia valía personal o un camino adecuado para reafirmar el “yo”. La inaceptable propuesta afectiva de estas personas parte de tres actitudes destructivas para el amor. “tu vida debe girar a mi alrededor” es cuando trata un histriónico de llamar la atención a cualquier costo; “el amor es puro sentimiento” emotividad y “tu amor no me alcanza” es prueba evidente de una insatisfacción afectiva. Piensa un instante en las consecuencias de estar con alguien que reúne las tres condiciones, todo el día y a toda hora.
Una de las frases favoritas de estas personas es “tu vida debe girar a mi alrededor” ya que trataran de llamar la atención a cualquier costo y es la exigencia vital de este estilo.
El hostigador tiene un amor matemático y es así de absurdo: la cantidad de amor asequible para satisfacerme es directamente proporcional al grado de atracción que ejerzo sobre la persona que amo, y el grado de atracción se mide por la atención obtenida.
La confusión que presentan las personas histriónicas/teatrales se debe a que igualan el amor al deseo. Y, evidentemente, no es así: el apetito por la persona amada es sólo una parte de la experiencia afectiva.
El autor dedica este capítulo al tipo de personas que siempre buscan ser el centro de atención, con su pareja y con los demás, lo que conlleva a que la relación se pueda salir de control. Algunas de las posiciones que toman estas personas, es penar que la pareja debe girar en torno a ellas, les falta control en sus emociones y debido a esto siempre estarán insatisfechos porque creen que no se les da el amor necesario o suficiente.
En el capítulo 2 el autor lo describe como el estilo paranoico/vigilante el cual es ese amor desconfiado. Para él o ella, no importarán tu buena conducta ni las demostraciones de amor. Siempre estarás en la lista negra de los enemigos potenciales, tu proceder siempre esconderá una “segunda intención”. La premisa del paranoico/vigilante es deshumanizante: “la gente es mala, y si bajas la guardia, te lastimarán”, familia incluida. Ser recelosos y contraatacar es us mejor forma de sobrevivir en un mundo percibido sospecha y lo obliga a presentar descargos que demuestren su fidelidad y lealtad. Pero el amor y la desconfianza no son compatibles, no importa cuántos “certificados” presentes. No encajan bajo el mismo techo.
Ellos siempre piensan que viven con el enemigo y si dan amor, se aprovecharán del ellos, es un método de inhibición
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