Ensayo Sobre Paradigmas

Ensayo sobre los paradigmas teóricos del aprendizaje.

Ivonne Calleja González bonneybugs@hotmail.com

Curso: Teorías y Modelos del Diseño Instruccional

7 de febrero de 2010

Paradigma Conductista.

El conductismo es la primera teoría que vino a revolucionar los estudios sobre el aprendizaje humano, ya que antes del conductismo el aprendizaje era percibido solo como procesos internos inmedibles, con la llegada del paradigma conductista se le dio otro enfoque al proceso de aprendizaje, pues las mediciones se realizan a través de fenómenos observables.

Las primeras aportaciones del conductismo se remontan en las primeras décadas de los XX, por Watson.

De acuerdo con Watson " para que la psicología lograra un estatus verdaderamente científico, tenía que olvidarse del estudio de la conciencia y los procesos mentales (procesos inobservables) y, en consecuencia, nombrar a la conducta (los procesos observables) su objeto de estudio". Como comenta Hernandez (2002) este paradigma acoge el método experimental como su línea de investigación, lo que nos lleva a comparar principios y leyes de comportamiento, sin embargo deja atrás los procesos no observables.

El conductismo de Watson tuvo gran aceptación entre los estudiosos de la materia lo que llevo a que se realizarán grandes aportaciones en esta etapa, tal fue el caso de Skinner quien aporto gran parte del conductismo operante, el cual se convirtió en la principal corriente del conductismo.

Desde el punto de vista conductista (Skinner, citado en Hernandez, 2002) el aprendizaje es percibido como un cambio observable de la conducta, los procesos internos son considerados poco importantes para el estudio del aprendizaje humano, ya que no son tangibles, y no pueden ser medidos de manera directa. Es el producto de una relación “estímulo-respuesta”. Según Skinner los procesos internos tales como el pensamiento y la motivación, no pueden ser observados ni medidos directamente por lo que no son importantes en la investigación del aprendizaje. Santrock enfatiza la importancia de la conexión experiencia y comportamiento (Greeno, Collins y Resnick, 1996). El aprendizaje únicamente ocurre cuando se observa un cambio en el comportamiento. Si no hay cambio observable no hay aprendizaje.

El reto del paradigma conductista según Skinner consiste en resolver problemas con la conducta humana y el moldeamiento de conducta, utilizando la técnica de “premio- castigo” que si bien no pueden solucionarse totalmente, también nos muestra el uso de reforzadores los cuales nos ayudan a fortalecer conductas apropiadas y a desechar las no deseadas. Otras aportaciones que tiene este paradigma son la asignación de castigos, recompensa y calificaciones al individuo.

Las ideas conductistas se aplican con gran éxito en la adquisición de conocimiento memorístico, sin embargo este conocimiento tiene una gran limitante, pues se utiliza la repetición para generar un aprendizaje pero no una asimilación de cambio de conducta, solo su realización. No genera un razonamiento sobre lo aprendido, pues no existe un análisis de lo que se está aprendiendo en qué momento se debe utilizar y por qué se debe utilizar, este tipo de aprendizaje memorístico no es traspasable. En el documento “Competencias del Nuevo Rol del Profesor”, elaborado por el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey menciona que la repetición no garantiza asimilación de la nueva conducta, sino sólo su ejecución (sabe multiplicar pero no sabe cuándo debe hacerlo, se sabe las tablas de multiplicar pero no sabe resolver un problema en el que tiene que utilizar la multiplicación). Este principio también puede ser utilizado en el adiestramiento y la capacitación de determinados trabajos donde el “estímulo- respuesta” es necesario para la comprensión y el éxito de la tarea.

Siendo la bases del estudio de la enseñanza, el conductismo ha seguido vigente en el desarrollo de los diseños instruccionales gracias a la aportación de Bandura (Mencionado por Santrock, 2005) con el enfoque cognitivo-conductual, el cual hace énfasis en el alumno, pues este debe monitorear, vigilar y controlar su comportamiento, en lugar de que este sea controlado por factores externos.

Paradigma Humanista

El paradigma humanista es un complejo conglomerado de facciones y tendencias, pues entre sus diversos seguidores se puede encontrar diferencias de tipo teórico- conceptual y metodológicas. Las aplicaciones del paradigma humanista se encuentran en gran parte sustentadas por el planteamiento, puesto que los constructos, esquemas teóricos y planteamientos educativos han sido elaborados por los adeptos del paradigma a partir tanto de la experiencia y el trabajo clínico, como de la reflexión crítica.

Los humanistas consideran que la práctica terapéutica clínica y la actividad educativa forman un continuum. En este sentido, se acepta que el proceso terapéuticoses es esencia un trabajo de formación, reconstructivo y de reaprendizaje y que, tiene mucho en común con los actos educativos que ocurren en las instituciones escolares.

El paradigma humanista tiene una importancia histórica, y ha desempeñado un papel catalizador y crítico en el ámbito de la psicología, en general; y de la psicología de la educación, en particular. Usando el paradigma humanista se han esbozado importantes señalamientos sobre las carencias en las prácticas educativas escolares, y se han hecho certeros comentarios que impugnan las concepciones e innovaciones educativas de los demás paradigmas, así a raíz de dichas críticas, los otros paradigmas se han visto en la necesidad de reconsiderar algunas de sus posturas y de ampliar sus horizontes teórico- reflexivos y de aplicación. El punto de vista humanista es que la educación se debería centrar en ayudar a los alumnos para que decidan lo que son y lo que quieren llegar a ser. La educación se basa en la idea de que todos los alumnos son diferentes y los ayuda a ser más como ellos mismos y menos como los demás.

Características importantes de la educación humanista:

Retomar las necesidades de los individuos como la base de las decisiones educativas, fomentar el incremento de las opciones del individuo, conceder al conocimiento personal tanto valor como al conocimiento público, tiene en cuenta que el desarrollo de cada individuo no debe fomentarse si ello va en detrimento del desarrollo de otro individuo, y considerar que todos los elementos constituyentes de un programa educativo deben contribuir a crear un sentido de relevancia, valor y merecimiento en cada persona implicada.

Rogers define la

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