Ensayo libérese del pasado

Libérese del pasado

Este libro me ha enseñado lo importante que es observar, un arte en el cual uno debe prestar mucha atención. Por lo general vemos de forma parcial, nunca vemos las cosas completamente, con toda nuestra mente y con plenitud, porque estamos tan interesados en nuestros problemas, tan condicionados, tan fuertemente cargados de creencias, de tradición, del pasado, que todo esto nos impide ver y escuchar. Y a menos que aprendamos este extraordinario arte, me parece que seguiremos funcionando, viviendo, con una parte muy pequeña de nuestra mente.

Otra de las cosas que me dejo el libro fueron una pasión de vivir, más grande que todas las cosas que los seres humanos hemos creado con la mano o con la mente, más grande que todos los Dioses, y tan sólo a través de este arte de vivir puede establecerse una nueva cultura, pero ese arte de vivir únicamente puede surgir cuando exista una libertad total.

Esa libertad no es un ideal, no es algo que suceda ocasionalmente; en la libertad, lo que cuenta es ese primer paso  que demos no el último, lo que haga ahora es mucho más importante que cualquier cosa que yo haga en el futuro. La vida es lo que está sucediendo en este instante y  no en algún momento imaginario ni en algo que el pensamiento ha concebido, por eso el primer paso que dé desde ahora es lo importante, porque si el primer paso está dado en la buena dirección hacia un fin determinado, esa buena dirección es inseparable de lo que está sucediendo en ese instante, es el amor a la verdad, el amor a la vida, no algo que uno aprende en la universidad, sino que aprendemos el arte de vivir en nuestra vida cotidiana. De la misma manera esta con esta libertad tenemos que ser responsables de cada paso que demos, ver plenamente y con responsabilidad cada dirección que tomemos.

Otra cosa importante es ver, escuchar y vivir. Entonces, como consecuencia de esto descubriremos que termina toda separación entre nosotros y lo observado que somos un una totalidad. Por consiguiente se puede observar con tanto cuidado que si realmente lo captamos encontraremos  belleza, esa es la belleza del ver, y si puede observar de ese modo, no tenemos que hacer nada más.

Si no somos capaces de vivir despiertos una vida feliz en el silencio del ’Yo’, moriremos dormidos después de vivir una vida de sufrimiento por la continua búsqueda de llegar a ser algo diferente de lo que somos.

Enrique Aguilar Reyes

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