Guiones Sexuales

A la mujer, durante mucho tiempo, y, aún en la actualidad, le ha tocado el papel secundario para disfrutar de su sexualidad, ciñéndose a los guiones que la cultura y la sociedad en la que vive le han reservado. Veamos algunos de estos guiones y, ¡ojalá!, que conociéndolos, cada mujer y cada persona pueda reescribir otros nuevos, que le permitan desarrollar su potencial erótico.

El 'guión victoriano'. Ha exigido de la mujer el cultivo de la virtud, la pureza e inocencia. Las mujeres no podían disfrutar, el orgasmo era pecado y las relaciones sólo estaban permitidas con un fin reproductivo.

El 'guión moral'. El sexo es bueno o malo, de ahí que muchas personas sigan haciendo este tipo de preguntas, «¿es bueno masturbarse? ¿Es malo tener relaciones todos los días?». Las mujeres han aprendido que el sexo es sucio. Desde este guión, la mujer ha de reprimirse, pero, a la vez, ha de mostrarse seductora y atractiva. Y, aunque es sucio, tienen que reservar su sexualidad para hacerlo con la persona que aman -léase, con el futuro esposo-. Además de suponer una contradicción, -¿no les parece?-, que haya que dejar para la persona amada algo que se considera sucio y vergonzoso, no deja de ser un subterfugio para proteger la descendencia legítima. ¿Y si utilizamos los métodos contraceptivos modernos para controlar la descendencia y autorizamos al sexo que cumpla con la función que la evolución y la 'civilización' le ha otorgado?: placer, señoras -y caballeros - placer, y más placer.

El 'guión de ahí abajo no se toca'. ¿Cuántas mujeres conocen cómo son sus genitales? La única preocupación que tienen en relación a ellos es que no huelan o que no estén sucios, y dedican a ello un esfuerzo más allá de lo higiénicamente deseable. Resulta llamativo el enorme mercado que existe de productos de higiene íntima femenina y ni un solo jabón 'íntimo' masculino. Y no me refiero sólo a los productos destinados a la menstruación. «Ahí abajo no se toca» y, entonces, las mujeres no se masturban. ¿Qué vergüenza, no? ¡Cómo se te ocurre! Además, cuando tenga pareja ya se verá, ya sabrá él como proporcionarme el orgasmo.

El 'guión del sexo es cosa de hombres'. ¿Cuántos de ustedes piensan todavía que los hombres tienen una mayor necesidad o que forma parte de su naturaleza? Las mujeres, en buena medida, viven su sexualidad en relación a la pareja, más desde el dar que desde el recibir placer. Son pocas las mujeres asertivas a la hora de pedir lo que necesitan para disfrutar sexualmente y, en muchas ocasiones, se encuentran con parejas que las 'penalizan' por mostrar este comportamiento («es que tú eres muy exigente»).

Estos guiones van quedando atrás, pero aún se necesita mantener el espíritu de la revolución sexual.

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