Inteligencia emocional. Se entiende la inteligencia emocional como una habilidad para percibir, asimilar, comprender y regular las propias emociones y las de los demás

Inteligencia emocional

Se entiende la inteligencia emocional como una habilidad para percibir, asimilar, comprender y regular las propias emociones y las de los demás, promoviendo un crecimiento emocional e intelectual para así guiar nuestra forma de pensar y nuestro comportamiento. Al hablar de la regulación del comportamiento propio, se refiere a la inteligencia intrapersonal, que es también la capacidad de comprenderse uno mismo, regular emociones, temores y motivaciones propias. La inteligencia interpersonal por su parte, es la capacidad de comprender a los demás, en cuanto a sus intenciones, sentimientos, motivaciones y deseos.

Como tal la inteligencia emocional es un concepto que ha tomado mucha fuerza en la sociedad con respecto a los distintos aspectos de la vida que enfrenta un ser humano, como el ámbito laboral y el personal, sobretodo porque hoy día tendemos a llevar una vida acelerada, ya sea por los compromisos laborales o problemas personales que conllevan a que el estrés trate de controlarnos, tanto así, que nuestras actitudes ante ciertas situaciones no sean las adecuadas.

Ejemplo claro de esto, es que muchas de las grandes empresas hoy día, focalizan funciones de ciertos departamentos, como el de recursos humanos, por ejemplo, en actividades motivacionales para su personal enfatizando mucho en el tema de la inteligencia emocional. Para una compañía es importante asegurar que su empleado se encuentre en excelentes condiciones emocionales, asegurarse que su empleado tenga claro que los temas emocionales son totalmente independientes de los temas profesionales y que hay límites que dentro de la compañía no deben sobrepasarse con el fin de mantener un buen clima laboral. Es aquí donde la inteligencia emocional juega un papel importante, porque es la herramienta que tenemos para controlar nuestras acciones en momentos de estrés, que dentro de una compañía pueden ser constantes sobre todo si son empleados que están bajo presión de cumplimiento de metas, mantenimiento de clientes, atención al cliente e incluso presión de un jefe. Con este concepto que con el tiempo es enfatizado cada vez más, las compañías buscan incentivar a sus empleados para hacerles ver sus motivaciones, brindarles reconocimientos que ellos mismos puedan identificar y sobre todo se logra que el control de las emociones propias sea el adecuado.

Desde el punto de vista personal, es igual de importante aplicar este concepto. Las familias hoy día, pasan por crisis que muchas veces no son ajenas a la manera como las parejas afrontan sus problemas, o como los padres manejan la relación con sus hijos y también la relación que cultivan los hermanos. El buen desarrollo interpersonal del ser humano comienza desde la base, el hogar. En los colegios, el niño que viene desde su hogar con problemas de relacionamiento, con problemas para interactuar con otros, problemas de aceptación de los pensamientos de otras personas y problemas de actitud, es un niño que en su hogar tiene los mismos inconvenientes, el manejo de la inteligencia emocional en el hogar es primordial para el desarrollo personal. Este niño no logra manejar sus sentimientos ni expresar sus emociones adecuadamente por lo que el papel de esta herramienta se vuelve fundamental. En la pareja, se debe tener la capacidad de conocer las intenciones de la otra persona, reconocer sus deseos, conocer sus sentimientos y los nuestros, tener claro cuáles son las motivaciones como pareja, de ahí que podamos lograr esa estabilidad emocional que se busca, con el fin obviamente de impactar positivamente en la familia.

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