LA IMPORTANCIA DEL PAPEL DE LA MADRE EN EL DESARROLLO DEL INFANTE
Enviado por DaliaOrtega • 11 de Agosto de 2013 • 1.221 Palabras (5 Páginas) • 661 Visitas
LA IMPORTANCIA DEL PAPEL DE LA MADRE
EN EL DESARROLLO DEL INFANTE
Por Dalia Cecilia Ortega Domínguez
El niño al nacer establece sus relaciones de afecto, sus necesidades de satisfacción, protección y apoyo con la madre. En un inicio dichas necesidades son primordialmente alimenticias, sin embargo no hay que olvidar las necesidades de contacto, ternura y cercanía (Ramírez, 2006). Hay familias en las que la relación madre-hijo es principalmente intensa, pero también existen familias en las que el bebé se encuentra privado de tales necesidades debido a la ausencia de la madre.
El papel de una madre nunca acaba, aun cuando los hijos han crecido, tienen sus propias responsabilidades, han formado su propia familia; en un ideal, la madre siempre estará al pendiente, preguntándose por el bienestar de sus hijos, ocupándose en ayudar a la crianza de los nuevos nietos, en un estar presentes para sus hijos…sin embargo no siempre sucede esto y en ocasiones la madre no figura en el desarrollo del infante…diferentes autores han marcado la pauta para decir que los primeros años de vida son los más importantes: Spitz mencionando la importancia de sentimientos de la madre hacia el bebé para su desarrollo y aprendizaje durante el primer año, Mahler sustentando su teoría en el desarrollo del niño a lo largo de los tres primeros años, Greenspan mencionando la importancia del “caregiver” en diferentes etapas de desarrollo…cada uno menciona aspectos similares, contraponen ideas…pero lo esencial es que mencionan como punto de referencia la presencia de la madre, ya sea como primer objeto (Spitz), cuidador (Greenspan), en la relación simbiótica (Mahler) es de vital importancia en el desarrollo del niño, en la formación del lenguaje para su futura comunicación, en la formación del yo y para su sobrevivencia.
El bebé nace necesitado de defensas contra el ambiente, Genovés (2000, haciendo referencia a Sandler, J. y Sandler, A. M. 1998) menciona que en los primeros momentos de la vida, las experiencias subjetivas que registraría el sensorio de un bebé son fundamentales. El bebé recibe del interior y exterior diferentes sensaciones que irán moldeando sus respuestas ante tales estímulos, recibe de la madre los cuidados que satisfacen sus necesidades de alimentación, abrigo, bienestar físico; sin embargo son de mayor importancia los estímulos afectivos; tanto cubrir necesidades físicas como emocionales son vividos como experiencias de placer y displacer. De acuerdo a Spitz (1965), el bebé reacciona con la respuesta sonriente (primer organizador) o bien con el llanto cuando se ausenta su pareja humana (ansiedad como segundo organizador), así mismo cuenta con una comunicación no verbal que actúa por la vía de signos y señales que la madre interpreta (comunicación semántica como tercer organizador). Cada uno de estos elementos deben ir acompañados de las atenciones afectivas de la madre para un desarrollo óptimo en el niño; aún así el niño llegará a sentir frustración, ya que la madre no llega a interpretar todas las señales que le manda su bebé, sin embargo esta frustración está implícita en el desarrollo y ayudará al niño en la formación del yo.
A diferencia de Spitz, Mahler (1968) no solamente menciona como primordial el primer año de vida, sino que menciona el desarrollo del niño en los tres primeros años en diferentes etapas, igualmente hace hincapié en que el infante nace como ser biológico y posteriormente se desarrolla como ser psicológico gracias al proceso de separación individuación con la madre. Cabe destacar la importancia de la madre en el desarrollo del niño ya que una relación simbiótica distorsionada gravemente o su ausencia representaría el trastorno central en la psicosis infantil.
Greenspan (2004) establece el termino de caregiver, el cual esta al pendiente del infante durante su desarrollo, comunicándole nuevas actitudes y valores aun antes de que pueda hablar, dichas interacciones ayudan al infante ir descubriendo su entorno, entenderlo y asimilarlo. Gracias a la experiencia del doble código, la voz de la madre se registra sintiéndose
...