LIDERAZGO QUÁNTICO
Enviado por 220288 • 20 de Junio de 2015 • 1.785 Palabras (8 Páginas) • 169 Visitas
Al igual que hoy en día considero que ninguna persona que cruza por tu camino forma parte de la casualidad, sino por el contrario, por alguna razón tuvo que estar ahí, en ese instante, en ese momento… hoy así veo a este libro, por alguna razón llego precisamente en este momento a mis manos, por alguna razón pude compartir fragmentos de él a personas que hacía mucho tiempo no veía y quizá al igual que a mí, esta lectura les ha cambiado la perspectiva de ver las cosas…
“Cuando tu cambias, todo cambia” (Cuevas, 2011).
Desee iniciar precisamente con esta frase porque es la base del libro, pero sobre todo por la importancia que tiene el entenderla en su totalidad y los grandes cambios que podrían generarse para nuestras vidas…
La finalidad de todo ser humano debería de ser el poder encontrar su propio bienestar, la frase se lee tan simple, pero mientras más profundizaba en la lectura, más entendía por qué no es tan sencilla, y vaya reto al que nos enfrentamos día a día, CAMBIAR UNO MISMO, de conducta, de pensamientos, de actos, de prejuicios, de rutina, de técnicas para la impartición de cátedra, etc., y dejar de esperar a que las demás personas cambien, dejar de preocuparnos por que esto suceda o no, qué tan pronto o qué tanto pueda tardar, dejar de buscarlo… y cuando se logre este primer paso, comienza la magia de la palabra… la generación del cambio a nuestro alrededor, seamos conscientes o inconscientes de ello. El autor claramente lo menciona “No es persuadir a los demás para que crezcan, es enfocarte en ser el mejor guía que puedes ser. Y si tú eres el mejor guía que hay en ti, los resultados serán exponenciales” (Cuevas, 2011, pág. 30).
En todo el transcurso de la lectura literalmente me sentí identificada, “El liderazgo quántico es no ser paternalista ni manipulador, porque esos estilos no nos llevan a evolucionar, sino a estancarnos en las dependencias, y el “borreguismo””. (Cuevas, 2011, pág. 24), y es que el alcance de esto, es mucho como docentes, donde mis actos o palabras no han permitido que mis alumnos aprendan a su ritmo, que logren su independencia, donde he ansiado cambios de todos y no me he preocupado por generarlos en mi.
El autor menciona que la atención es dirigida por nosotros; y hacia donde esta va, va nuestra energía y nuestro potencial, como lo veíamos en el tema de la observación objetiva, precisamente, ante los diferentes conflictos que pudieran surgir no solo en nuestras organizaciones sino en nuestras propias familias, somos nosotros quiénes decidimos si prestar la atención o no, si gastar la energía positiva o negativamente y obviamente nuestro potencial.
Me hace reafirmar de alguna manera lo que me ha costado 27 años deducirlo, nadie podría experimentar en cabeza ajena, todos tenemos que vivir la experiencia para de esta forma poder estar buscando un aprendizaje, no obstante no hay garantía de que así suceda… pero forma parte de este proceso, el evolucionar al ser más creativos al momento de las ideas para que de alguna manera ayuden a resolver o enfrentar tal situación y por ultimo ésta sea abordada o puesta en acción.
“No hay experiencias, ni personas, ni situaciones, buenas o malas. Esa polaridad es la forma en que aprendimos a interpretar el mundo”. (Cuevas, 2011, pág. 64), jamás me hubiera imaginado ser docente, jamás tuve claridad de lo que deseaba para mi futuro, pero el pertenecer ahora a una organización y poder compartir lo poco que sé con mis alumnos me incita a mejorar, es un vivir diario y nada más, días buenos, días malos, decisiones asertivas otras no tanto, pero que sin lugar duda coincido, al final de cuentas, serán experiencias y depende de nosotros el convertirlas verdaderamente en aprendizaje.
“Cada experiencia que calificaste de mala también fue una lección y una oportunidad” (Cuevas, 2011, pág. 67) y firmemente lo creo así.
Cuando veíamos en clase el tema del conflicto me genero mucha incertidumbre, ciertamente yo era una de las personas que consideraba que esté no podía ser positivo, por alguna razón en la escuela o hasta en nuestras mismas organizaciones se nos ha dicho de esa manera, más sin embargo se tiene otra cara, como lo dice el autor Barrera Santos “Es importante hacer una delimitación de qué tipo de conflicto trataremos. El conflicto organizacional, es entendido como aquel que se circunscribe dentro de un grupo de personas que tienen una relación con responsabilidad compartida, que están ligados por objetivos o metas o que simplemente hacen parte de un proceso o una estrategia de grupo”. (BARRERA SANTOS, 2004, pág. 2)
No es que los conflictos vayan a terminar al implementar el liderazgo quántico, pero creo que si se puede comenzar a observar alternativas sobre como sacar lo mejor de esa experiencia vivida, como bien lo mencionaba con anterioridad el autor, se puede comenzar a ver distintas perspectivas del mismo conflicto. “Cuando los conflictos aportan a los grupos, mejorando su desempeño, motivación y el entendimiento para el logro de metas, objetivos e integración, representan su razón de ser en la organización” (BARRERA SANTOS, 2004, pág. 6).
Y un conflicto puede ser tan sencillo como el querer o no ser capacitados en algún tema, el desear continuar con nuestro crecimiento académico como docentes, bien lo dice Cuevas “Al dejar de aprender cosas nuevas le abrimos la puerta al aburrimiento y hasta la depresión,
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