La interacción entre el individuo y el entorno es una serie de movimientos de internalización y externalización que se tiene

La interacción entre el individuo y el entorno es una serie de movimientos de internalización y externalización que se tiene. Los sentidos y el lenguaje son bases instrumentales. Bateson define la vida psíquica como la unidad de supervivencia es el organismo en un ambiente.

El self es simplemente la condición de simple reflejo de las circunstancias que rodean al individuo. Siendo así que se construye la identidad, el núcleo de la mente; Ackerman la define como la dirección y el contenido de los impulsos, está asociada con la estabilidad del comportamiento. Sirve de anclaje y cimientos para la narrativa. Es la representación psíquica que todos poseen en diferentes ámbitos, ya sean individual, familiar, de pareja, etc.

Para un psicoterapeuta mediante la expresión de los síntomas del paciente se plantea una convivencia donde él interviene profesionalmente, sin embargo se enfrenta siempre a que las personas tienden a resistirse al cambio, es por esto que se impone una conceptualización que ayude a comprender al individuo y a la familia que las disfuncionalidades relacionales pueden provocar dinámicas de cambio y que es totalmente normal y aceptable; en torno al individuo se establece la narrativa. Los procesos comunicacionales que constituyen la relación y el núcleo de identidad pueden irse modificando incorporando elementos o dejando otros. En los procesos individuales se facilitan los cambios favorables en la percepción de sí mismo y esto facilita el establecimiento de nuevas relaciones emocionalmente nutricias y la comunicación con los demás brinda una nueva imagen y mensajes de madurez y competencia.

Los síntomas con los que un paciente llega están vinculados a ciertas narraciones evocadoras del discurso social del poder y desaparecen cuando se externalizan con narrativas que no son parte del problema, es decir, se requiere sacar al paciente de su discurso de problemas para que los síntomas se vayan reduciendo.

Cuanto más grande la patología, más está implicada la identidad, y es más pobre la narrativa, es por eso que en psicosis y patologías los discursos son deficientes. La experiencia atraviesa diferentes modificaciones al ser influenciada por interpretaciones de realidad y diferentes vivencias; así la narrativa individual se construye en base a la experiencia previamente vivida e ideologías sociales. El resultado emocionalmente nutricio depende de la fuente y de la recepción individual o de la transmisión de la sociedad. Así la identidad y la narrativa condicionan la continuidad de la nutrición emocional facilitándola o dificultándola.

La vinculación emocional en la familia provoca que las narraciones sean diferentes, es así que se tiene que tomar la de la familia de origen, pues es la que tiñe a los miembros y sus narraciones. No solo en la familia se construyen las relaciones, lo escolar, los defectos físicos (reales o imaginarios) tienen mucho peso en la configuración de las narraciones, además del ámbito laboral que también contribuye a la percepción de las personas.

Narraciones familiares

Según hagan referencia a la familia de origen, la pareja o la de procreación las historias varían, teniendo también en cuenta que en la familia de origen durante la infancia es la que arranca, pero se prolongan durante la vida sometiéndose a un proceso de verificación y rectificación en el trato de los padres hacia los hijos y entre hermanos. Incluso la relación de pareja entre los padres construye una narrativa sobre las expectativas en relaciones de pareja del individuo. La pareja se construye con las familias de origen como referencia ya sea para bien o para mal.

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