Los Niños Y La Muerte

LO QUE PIENSO DE LOS NIÑOS Y LA MUERTE DE ELISABETH KUBLER-ROSS

Alguien una vez dijo: “que la muerte esta tan segura de su victoria que nos da toda una vida de ventaja”; esta frase me deja simplemente sin palabras y con el único regocijo de que cada minuto que pasa, es un regalo de Dios que me permite continuar en este camino finito llamado vida.

Pero que pasa cuando esta “vida de ventaja” es solamente años que podemos contar con los dedos de nuestras manos; el libro LOS NIÑOS Y LA MUERTE está basado en la década en que la doctora ELISABETH KÜBLER-ROSS trabajó exclusivamente con niños, y ofrece a las familias de niños enfermos o ya fallecidos la ayuda y la esperanza necesarias para sobrevivir. En un lenguaje sencillo y cálido, Kübler-Ross nos habla de los miedos, las dudas, la confusión y la angustia de aquellos padres confrontados con una enfermedad terminal o con la muerte súbita de un hijo.

La muerte es un trago amargo y en algunos casos imposibles de superar; la experiencia con que tengo más cercanía es con la familia de mi esposo; en tan solo un día una meningitis bacteriana acabo con la vida de su hermano menor, dejando así una huella imborrable y un sentido de impotencia a sus padres y allegados.

Como le explicas a una madre que el ciclo de la vida fue roto, que ese hijo que tenía que cuidar, que tenía que ver crecer, que tenía que ver graduarse o casarse ya no va a estar ahí…la muerte simplemente decidió no seguir el orden lógico y planto sus propias reglas. A pesar de ser un tema delicado, el libro está escrito con un gran respeto, comprensión y empatía. Está basado tanto en la experiencia personal de la autora como en testimonios de niños y familiares que se han enfrentado al deceso y la pérdida. Aborda muchos aspectos: desde la sabiduría de los niños hasta el duelo de la familia.

Claro esto no ha de extrañarnos ya que Kübler-Ross, era una de las gurús en esta tema y con gran cantidad de obras sobre el tema, siendo este libro una de sus obras de arte por tocar un tema tabú en nuestra sociedad y que en la mayorías de los casos simplemente tratamos de olvidar y de regocijarnos con la frase “Murió un angelito y ahora está junto a Dios”, sin realmente concientizar y sanar sobre la consecuencia de la muerte.

Como por ejemplo cuando Mike con una enfermedad terminal le deja una nota a su madre la noche de su muerte. En resumen el le dice que el cumplió una etapa de la vida y que ella también deberá de cumplirla, no es una despedida…es un hasta luego. El “agradecimiento” de la madre es incuantificable hacia su hijo y como ella lo menciona es un relato que busca ayudar a otros padres.

Sin embargo hay temas como el suicido infantil que simplemente queda fuera de toda compresión, donde no solo el elemento de la perdida sino también el elemento sorpresa hacen una combinación letal, absolutamente invencible. Lección

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