“Los cuentos que yo cuento”
Enviado por Leticia Yamin • 23 de Abril de 2017 • Tarea • 963 Palabras (4 Páginas) • 256 Visitas
“Los cuentos que yo cuento”
Esta frase acuñada en el corazón de todos los mercedinos, nos recuerda que un día como hoy, hace diez años, a la edad de 85 años dejaba este inquieto mundo para formar parte del mundo de los “ilustres ciudadanos”, a Rosa Gutiérrez, la “Señorita Rosi”, como la solían llamar en su pueblo natal de Mercedes. Casada con un médico rural de familia acomodada y madre de dos hijos. Casi sin querer y por casualidad, vivió rodeada de letras, historias, amor, encuentros y desencuentros pero por sobre todo inmersa en una profunda vocación que era la de comunicar, la de defender los derechos, la de educar y ser ejemplo para sus hijos y nietos.
Rosa fue hija de una familia de inmigrantes españoles que llegaron a este pueblo escapándose de la guerra europea, la menor de seis hermanos varones. Sus padres, inmigrantes, no pudieron terminar sus estudios primarios, ya que provenían de hogares con muy bajos recursos y debían ayudar en las tareas del campo para poder sobrevivir.
Los hermanos, trabajaron desde pequeños en la cosecha, pero Rosa pasó su infancia alternando su tiempo entre la escuela primaria y los quehaceres rurales. Lo cual no fue fácil para ella, ya que nadie cercano la podían ayudar con sus estudios, por eso su esfuerzo era doblemente meritorio.
Desde chica siempre fue extrovertida y le gustó narrar historias, fruto de su amplia imaginación, por las que en su paso por la escuela primaria y secundaria dejó huellas entre sus maestros, profesores y compañeros.
Pese a las controversiales opiniones de su familia, Rosa, ya adolescente y motivada por su inquietud por el estudio, decidió seguir adelante y se inscribió en el único colegio secundario del pueblo, la Escuela Normal “Manuel Belgrano”, recibiéndose más tarde de “Maestra Normal”.
Mientras estudiaba, ella ayudaba a los hijos de los otros campesinos con sus tareas escolares, desarrollando cada vez más su vocación por la docencia y no dejando atrás su otra vocación… “narrar” y es aquí, donde vamos a enfocar, la historia de Rosa Gutiérrez.
Los primeros pasos de la “Señorita Rosi” fue en una escuelita rural, cercana a los campos de su familia, donde asistían los hijos de los peones rurales y siempre al terminar sus clases, ella les narraba alguna de sus historias. Historias que atrapaban a los chicos y cada día le pedían nuevos relatos. Relatos de personas comunes y no tanto, pero ella sabía captar el exacto momento en que una vida cobra un significado especial como para integrar un cuento.
Así y muy en el anonimato, desde la humildad que la caracterizaba, empezó a plasmar en hojas de papel esas historias narradas oralmente. Historias que a lo largo del tiempo nos muestra la lucha de muchos campesinos inmigrantes por sus derechos. Historias de mujeres que con su sacrificio rompen paradigmas sociales y buscan un bienestar. Historias que educan y comunican experiencias.
...