Metamorfosis En La Adolescencia
Enviado por mit2389 • 21 de Abril de 2015 • 2.350 Palabras (10 Páginas) • 237 Visitas
Introducción
Cuando las el niño comienza a sufrir cierto tipo de transformaciones podemos dar en cuenta de que está entrando a una etapa de cambios para él; esta etapa es la de la pubertad, estos cambios surgen para dar un paso de la niñez a la adultez.
En la pubertad los cambios se dan de forma paulatina, y la forma de madurez física es sorprendente, el adolescente sentirá que estos cambios toman su tiempo, sin embargo la madurez física es rápida, ya que lleva aproximadamente entre seis y 7 años para que la madurez este completa.
Hay varios factores que pueden dar pauta a la pubertad, el entorno, la nutrición, el peso, inclusive una herencia genética, todos estos factores son importantes para la llegada de la pubertad.
El puberto adquirirá cualidades que no tenia en la infancia, se sentirá con poder de hacer lo que quiera, pero de igual manera se dará cuenta de que no es así, adquirirá héroes a los cuales seguirá e identificara. Llegara a una madurez antes de que se lo imagine.
Metamorfosis en la pubertad.
Con la llegada de la pubertad comienzan las transformaciones que han de llevar la vida sexual infantil hacia su definitiva constitución normal. El instinto sexual, hasta entonces predominantemente auto eróticos, encuentra por fin el objeto sexual. Se encontraban en una búsqueda de un fin sexual que les proporcionara determinado placer. Con la llegada de este fin sexual, las zonas erógenas se subordinan a la primacía de la zona genital. Dado que el nuevo fin sexual determina funciones diferentes en relación a cada uno de los sexos, las evoluciones sexuales respectivas divergirán considerablemente.
La normalidad de la vida sexual produce por la confluencia de las dos corrientes dirigidas sobre el objeto y el fin sexual, la de ternura y la de sensualidad.
El nuevo fin sexual, consiste en el hombre, en la descarga de los productos sexuales, a este acto final del proceso sexual se enlaza un máximo placer.
Se ha escogido como lo esencial en los procesos de la pubertad lo más singular de los mismos; el manifiesto crecimiento de los genitales exteriores que durante el periodo de latencia en la niñez había quedado interrumpido. Simultáneamente, el desarrollo de los genitales internos ha avanzado hasta llegar al punto de poder proporcionar productos sexuales, esto en el caso de los varones, en el caso de las mujeres, es acoger estos productos para dar vida a un nuevo ser.
Estos aparatos deben de ser puestos en actividad por estímulos apropiados, los cuales pueden representarse por tres caminos: del mundo exterior, excitación de las zonas erógenas; del interior orgánico, y de la vida anímica, que constituye un almacén de impresiones exteriores y una estación receptora de estímulos internos. Estos caminos pueden dar a que surja la excitación sexual y esta se manifiesta por dos géneros: anímicos y somáticos. Los signos anímicos consisten en una peculiar sensación de tensión, de un carácter altamente apremiante, entre los signos físicos aparece, una serie de transformaciones de los genitales que tienen un sentido indudable, el de hallarse éstos dispuestos al acto sexual, esto es, estar preparados para su ejecución.
La tensión sexual es el carácter de tensión de la excitación sexual que plantea un problema, cuya solución se muestra tan difícil como importante seria para la inteligencia de los procesos sexuales.
El origen y la esencia de la tensión sexual, que surge simultáneamente con el placer en la satisfacción de las zonas erógenas. La hipótesis más próxima, es que la tensión surja del mismo placer, no sólo es por sí mismo inverosímil, sucumbe a la observación de que en el máximo placer, o sea, el ligado a la descarga de los productos sexuales, no se produce tensión alguna, sino que, cesa en absoluto. El placer y la tensión sexual no pueden estar ligados más que de un modo indirecto.
Normalmente sólo la descarga de las materias sexuales pone fin a la excitación sexual, existen otros puntos de apoyo para relacionar la tensión sexual con los productos sexuales. En una vida continente acostumbra al aparato sexual descargarse de la materia sexual descargarse de la materia sexual en periodos variables, pero no irregulares; descarga que va acompañada de una sensación de placer y que tiene lugar durante una alucinación onírica nocturna, cuyo contenido es el acto sexual.
Es sabido que hasta la pubertad no aparece una definida diferenciación entre el carácter masculino y el femenino, antítesis que influye más decisivamente que ninguna otra sobre el curso de la vida humana. No obstante, las disposiciones masculinas y femeninas resultan ya claramente reconocibles en la infancia. El desarrollo de los diques sexuales (pudor, repugnancia, compasión, etc.) aparece en las niñas mas tempranamente y encontrando una resistencia menor que en los niños. En las niñas es mayor la inclinación a la represión sexual, y cuando llegan a surgir instintos parciales de la sexualidad escogen la forma pasiva. La actividad auto erótica de las zonas erógenas es en ambos sexos las mismas.
Mientras que los procesos de la pubertad queda fijada la primacía de las zonas erógenas, y la erección del miembro viril indica apremiantemente al sujeto un nuevo fin sexual, esto es, que la penetración en una cavidad excitadora de la zona genital, tiene lugar en los dominios psíquicos el hallazgo de objeto, momento que se ha venido preparando desde la niñez. Este objeto sexual al cabo de un tiempo desaparece, y quizá precisamente en la época en que fue posible para el niño construir la representación total de la persona a la cual pertenecía el órgano productor de satisfacción.
El instinto sexual se hace en ese momento auto erótico, terminando el periodo de lactancia, vuelve a formarse una relación primitiva, el hallazgo al objeto no es más que un retorno al pasado.
PUBERTAD
Se puede distinguir entre pubertad y adolescencia. Para la mayoría de las personas, la pubertad finaliza, mucho tiempo antes de que se acabe la adolescencia, aunque sí es cierto que la pubertad constituye los factores y rasgos más evidentes del comienzo
...