Mexicanidad Y Esquizofrenia

EL MEXICANO Y LA ESQUIZOFRENIA

Primero que nada quiero dar alusión a un término, “JANO” que significa dualidad y equilibrio y es por eso que en esta lectura tomamos como “MexiJano” al arquetípico representante de la mentalidad dual.

Comenzaremos haciendo una reflexión acerca de la mexicanidad, ¿qué es lo que nos mueve? ¿A qué se debe la diferencia entre las personas que viven en la conformidad y aquellas que luchan a toda costa por superarse y obtener un nivel de vida mucho mejor? De donde es que provienen todas esas sensaciones de desánimo, paz interior, supervivencia, muchas corrientes científicas han tratado de responder esto, en este libro también se trata de responder a estas preguntas tomando en cuenta desde un punto de vista histórico y del sentido común.

Un gran problema para nuestro México, es el cambio del bienestar anímico producida por el miedo concreto a la miseria y violencia, nuestra crisis de identidad, la ausencia de un sentido de existencia colectiva, Ausencia de ley” o “conjunto de situaciones que derivan de la carencia de normas sociales o de su degradación” es así como la Real Academia define a la anomia.

Y es aquí donde proclive la esquizofrenia a esa deformación cultural que ha llevado nuestra historia donde schizo quiere decir escisión o ruptura y phrenos mente o espíritu. Y es aquí donde se hace una ruptura o un divorcio entre lo onírico y lo real, ¿A que le tiras cuando sueñas mexicano? Es así como comienza el texto de Basave que hace referencia a la disociación que existe entre lo que ambicionamos y lo que realmente es posible. No es tanto que soñemos mucho sino que no sabemos soñar, Estamos viviendo en una sociedad de dualidades continuas donde hablamos con tal rigidez de la ley que aquí se aplica pero que patéticamente se viola a diario y de forma metódica.

La esquizofrenia de la religiosidad y el futbol, el mexiJano no oscila entre el fatalismo y la fe esperanzadora, sueña con la resurrección mientras se dice resignado a la muerte, no que nos hace falta es soñar más con realismo.

Nuestra ley es fácilmente violada y pone en desventaja a quien juega limpiamente. Justo ahí entra una parte circunstancial de nuestra dualidad de mexicanos: lo ideal lo está hecho para hablarse o escribirse y lo real para vivirse. En esto podríamos aplicar el refrán que dice: “Del dicho al hecho hay mucho trecho” y si nos ponemos a analizarlo es verdad ya que nos resulta feo, incomodo, y muy difícil cumplir con las cosas que nos marcan como correctas y es por eso que recurrimos a lo facilito a lo que no nos cuesta ni nos molesta.

Estoy convencido de que los mexicanos queremos de una u otra forma a México pero me pregunto ¿qué tipo de querencia es? hablamos acerca del patriotismo y el 16 de Septiembre todo mundo se enorgullece de ser mexicano, lo celebra en grande pero preguntémonos ¿en verdad nos sacrificaríamos por el bienestar de nuestro país?, ¿pelearíamos por nuestro país?

Si exigimos

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