Pautas De Enseñanza Y Desarrollo De Personalidad

PAUTAS DE CONDUCTA Y ESTILOS DE CRIANZA

“No podemos proteger a nuestros hijos de la vida.

Por lo tanto, es esencial que los preparemos para ella”.

Rudolf Dreikurs.

Si bien es cierto, la familia es el núcleo de nuestro desarrollo social, personal y emocional. Es en ella donde se ponen en práctica las primeras acciones de interacción y ahí mismo se establecen nuestros estándares de conducta. De ahí la importancia de obtener lo mejor de nuestra formación.

Erickson (1963) cita en su texto una clasificación para aquellos que son los actores directos en nuestro desarrollo y formación como personas: los padres.

Menciona que la existencia de padres con una visión lineal produce a su vez individuos poco capaces de involucrarse activa y positivamente en la sociedad. Es decir, la existencia de padres autoritarios en el hogar generan limitaciones en el desenvolvimiento de sus hijos, los tornan inseguros y poco aptos en la realización de varias actividades, al igual que aquellos padres permisivos, que al no establecer reglas claras y estándares manejados no sólo en el hogar sino en la sociedad misma, conciben personas conflictivas que no respetan límites ni opiniones diferentes a las suyas.

Entonces ¿Qué es lo ideal?… Es un poco difícil determinar conductas generalizadas, pues sabemos que como individuos somos únicos y con razonamientos muy diferentes, sin embargo; es importante señalar que el afecto, el apoyo, el ejemplo y sobre todo el manejo de valores en la familia forjan en las personas una formación integral. Es por ello que entre estas clasificaciones se encuentran los padres democráticos.

La democracia se entiende como la acción de decir de manera autónoma lo que cada individuo considere mejor para su bienestar, sometiéndose este a una votación, aceptando lo que la mayoría decida sea o no su pretensión. Incluyéndose este término en el núcleo familiar, se orienta a tomar decisiones de manera que no se afecte a ningún miembro siempre y cuando cada uno cumpla con sus responsabilidades determinadas con anterioridad. Es por ello que a mi juicio considero este tipo de educación familiar como la más favorable, debido a que no se limita a los niños de manera rígida, ni se deja a la deriva para que tomen decisiones, sino que se orienta a tenerse confianza, ser responsables, seguir de manera sutil normas de conducta que en su presente y futuro serán su carta de presentación hacia la sociedad a la que se integra.

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