Pedagogía De La Autonimia

Paulo freire pedagogía de la autonomía

Capitulo3: Enseñar es una especificidad humana

Ideas del autor

Enseñar exige seguridad, competencia profesional y generosidad.

1. El profesor que no lleve en serio su formación, que no estudie, que no se esfuerce por estar a la altura de su tarea no tiene fuerza moral para coordinar las actividades de su clase.

2. La reacción negativa al ejercicio del mando es tan incompatible con el desempeño de la autoridad con la avidez por el mando.

3. Como profesor, no me es posible ayudar al educando a superar su ignorancia si no supero permanentemente la mía. No puedo enseñar lo que no sé.

1. Un docente debe estar listo para enfrentarse a un grupo de estudiantes; más allá de estar actualizado en distintos temas que conciernen dentro de la formación del estudiantado, el profesor tiene la obligación de conocer y saber cómo aplicar sus conocimientos. Si no se esfuerza por ser un profesional en su área (en ciencia, como en nuestro caso) será pues un mediocre, o quizá menos que eso, por lo tanto, los estudiantes sabrán que tienen la oportunidad de manipular al profesor de tal forma que las clases no serán productivas, generado por el descontrol o ausencia de los estudiantes en las clases de ciencia. Un profesor de esta categoría no sabrá cómo controlar una clase, o sea, perderá su autoridad.

2. La autoridad no es sinónimo de erradicar la plenitud de la libertad; no es imponer leyes conductistas. El profesor no tiene el derecho de reducir el grado de libertad del deseo cognitivo del estudiante; la libertad es un concepto más complejo y ético. La libertad bien podría definirse, entre tantas formas, como una rebeldía, pero una de agrado educativo: con la presencia de un profesor apto para desarrollar una clase, o sea, con un profesional que cumpla además de los objetivos de su minuta, practique también relaciones interpersonales ricas en ética y moral, justicia y generosidad, los estudiantes sabrán que tienen la libertad de rebelarse ante un tema enseñado y ejercer una crítica constructiva de ella; puede interrogar eso que se le está enseñando y, con la ayuda del profesor, llegar a una conclusión sobre ella y construir juntos un concepto claro de ese tema; esa libertad satisface las necesidades metodológicas y cognoscitivas del marco educativo. Esto es una autoridad democrática

3. Como bien lo dijo Freire, “me muevo como educador porque, primero, me muevo como persona”. La estabilidad emocional consigo mismo como individuo, el aprender a aprender a ser un mejor ser humano es la clave para relacionarse con sus semejantes. Debe conocer cómo se mueve dentro de él mismo en el momento de resolver un problema o un acontecimiento cualquiera; si el educador logra, de la manera más adecuada posible, solventar dicha estructura dificultosa, puede construirse con mayor facilidad como persona; estará listo para ejercer una profesión como educador ferviente.

Enseñar exige compromiso.

1. Una de mis preocupaciones centrales debe ser la de buscar la aproximación cada vez mayor entre lo que digo y lo que hago, entre los que parezco ser y lo que realmente estoy siendo.

1. Un profesor puede ser un ejemplo de modelo a seguir, ya que, en ciertas oportunidades el estudiante admira el talento del educador en su desenvolvimiento como instruido que es. Tiene que ser una persona que no actúe de una forma en la clase y de otra fuera de ella; el hecho de ser profesor no significa que deba colocarse una máscara de ética, de sonrisa, de generosidad, de responsabilidad, y fuera del contexto educativo formal se lo quite. Debe demostrar a sus estudiantes que él no es un hipócrita, un mentiroso. De igual forma, un profesor debe dejar claro que es capaz de resolver problemas sin mentir, y que es capaz de hacer todo lo posible para ayudar, aunque tarde en hacerlo. Necesita dar a entender que está listo para recibir inquietudes, de evaluarlas y contestarlas, pero que también está listo para decir no sé, pero déjame averiguar sobre eso y mañana te respondo.

Enseñar exige comprender que la educación es una forma de intervención en el mundo.

1. Es un error decretar la educación como tarea solamente reproductora de la ideología dominante, como es un error tomarla como una fuerza reveladora de la realidad, que actúa libremente, sin obstáculos ni duras dificultades.

1.

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