Procesos de trabajo, condiciones laborales y daños a la salud

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Universidad Autónoma de Querétaro

Facultad de Psicología

Maestría en Psicología del Trabajo

Título: El trabajo

         Seminario: Procesos de trabajo, condiciones laborales y daños a la salud

Alumna: Ana Rosa Martínez Rodríguez

Docente: Dra. Susana Martínez Alcántara

Fecha de entrega: 18 de abril de 2015

INTRODUCCIÓN

El trabajo forma parte de nuestro día a día, a través de él, logramos insertarnos en la sociedad como seres productivos, razón por la que se vuelve un factor importante que marcará conductas a desarrollar, influirá en la forma en que percibimos el mundo, y sobre todo nos ayudara a formarnos como individuos;  dicha relación dada, se ve clarificada con las aportaciones realizadas  por Marx (1981), en donde menciona que “...el trabajo nos permite la transformación recíproca entre el hombre y la naturaleza, para satisfacer nuestras necesidades a través de la creación de bienes.”1, dejando visto que al realizar algún trabajo no solo la naturaleza se ve transformada, sino que el hombre a través de ese proceso también sufre una transformación tanto física como psíquica.

En este ensayo hablare de la transformación psíquica que se da en el proceso, en donde idealmente el trabajo debe brindar fuente de placer, fortalecer el autoestima, la identidad y actuar positivamente para promover y preserva la salud social, pero, ¿Qué sucede cuando estos parámetros no se ven satisfechos en los centros de trabajo?, es decir, partimos de un concepto ideal de lo que el trabajo debe proporcionar al individuo, pero no siempre se cumple con ese objetivo, y es en este punto dónde al ver la realidad, se puede observar cómo el trabajo tiene un trasfondo menos optimista para un gran segmento de la población.

DESARROLLO

Marx (1849) en su libro “Trabajo asalariado y capital” habla sobre la fuerza de trabajo, y cómo esta es vista como una mercancía que el obrero vende a un tercero para poder conseguir los medios para vivir, y es hasta que sale de él, donde la vida para el obrero comienza.2

Esta aportación brinda una idea de lo que el trabajo representa para el obrero, pero, ¿En qué momento el trabajo pasa de ser una actividad placentera a ser algo displacentero? Engels en su escrito de “La situación de la clase obrera en Inglaterra” (1845) expresa el siguiente pensamiento “…la actividad productiva voluntaria es el mayor disfrute que conocemos, en cambio el trabajo forzado es más atroz y degradante. Nada más terrible que tener que hacer todos los días, algo que nos repugna, pues ¿Por qué trabaja?¿Por  el placer de la creación? ¿Por instinto natural? En modo alguno. Trabaja por dinero…La división del trabajo aún a multiplicado los efectos embrutecedores del trabajo forzado.”3,  por lo que a su vez Marx encuentra en la organización de los procesos de trabajo la separación entre el pensar y el ejecutar, dando paso a la enajenación o alienación, ésta división del trabajo ha creado especialistas y con ello al especialidiotismo (fachidiotismus)4, hasta el punto en que el hombre llega a ser un implemento de la maquina, teniendo consigo trabajos monótonos, con nula toma de decisiones, en donde los tiempos y movimiento están estipulados por las máquinas,  y el obrero pierde todo control sobre el producto y el proceso de trabajo, es en este punto donde el trabajo pasa a ser de una actividad creadora-placentera, a una actividad enajenante-embrutecedora-displacentera.

La alienación nos ayudara a transitar con mayor facilidad en el cuestionamiento antes planteado, ya que con su conceptualización nos brindara una visión más amplia de lo que el trabajo representa para el trabajador y como vive su realidad inmerso en esta condición.

Para Adam Shaff (1979) basando en los trabajos de Marx, señala que: “La alienación designa la relación  entre el hombre y sus diversos productos; ésta consiste en que el hombre crea las cosas, ideas, instituciones, etc. Existentes, pensados en la satisfacción de determinadas necesidades sociales y tendiendo a determinadas metas en relación con aquellas”5,  para Shaff, en el estudio de Marx ésta alienación ha sido caracterizada en dos niveles, el primero es la alienación objetiva y el segundo alienación subjetiva.

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