¿Qué conflicto de identidad manifiesta un adolescente con problemas de alcohol o drogas?

¿Qué conflicto de identidad manifiesta un adolescente con problemas de alcohol o drogas?

De acuerdo a lo planteado por Erikson (1968), el conflicto principal que se manifiesta en la adolescencia es la búsqueda de su propia identidad, por tanto, es necesario que el joven pueda resolver de manera positiva esta crisis para lograr su estabilidad emocional. Cuando esto no se consigue, los adolescentes presentan dificultades de adaptación y ajuste a las nuevas exigencias, las que pueden derivar en problemas tales como: trastornos alimentarios, delincuencia juvenil o uso y abuso de sustancias (Santrock, 2006).

Según LEP (2016), algunas de las causas por las adolescentes consumen drogas o alcohol pueden ser: ceder a la presión de amigos, travesuras, experimentación, vía de escape a las presiones de la vida cotidiana, por evasión o diversión.

De acuerdo con Erikson (1968), en el Estadio V, identidad versus confusión de identidad, se  se visualiza la necesidad de identidad del yo. La resolución de esta crisis psicosocial es el logro de la fidelidad. Esta virtud se expresa en una adhesión consistente y duradera con los ideales y compromisos juveniles. Si esto se logra se consigue una identidad diferenciada y coherente, de lo contrario la crisis de identidad puede producir respuestas que reflejan un desequilibrio temporal, y que si se prolongan en exceso pueden generar respuestas inadecuadas, como la identidad difusa, sin tener claridad de quién es uno mismo o hacia donde va, con ausencia de objetivos, apatía o incluso dificultad para decidir o comprometerse con sus propias decisiones vitales. La imposibilidad de resolver la crisis de esta etapa puede acarrear dificultades en la vida adulta, impedir la autorrealización y postergar los compromisos de la adultez. Los adultos que sufren esta difusión de identidad parecen ser eternos adolescentes, inseguros, inestables, con dificultad para comprometerse con sus proyectos, incapaces de resolver sus problemas sociales y emocionales, incluso pudiendo presentar adicciones u otras patologías.

.        Un adolescente con consumo problemático de alcohol o drogas no acepta su propia identidad, no es capaz de asumir su realidad y busca la evasión a través del consumo o bien lo incorpora como una manera de compensar su equilibrio emocional, social o biológico. Pueden aparecer como un síntoma de otras problemáticas asociadas ya sea a nivel individual o del sistema familiar, donde el consumo puede ser solo la punta del iceberg de una serie de trastornos que afectan su desarrollo biopsicosocial.

Referencias:
LEP, semana 7 (2016). Psicología del Desarrollo, UNIACC.
Santrock, J. (2006). Psicología del desarrollo. El ciclo vital (10° ed.) (pp. 385-460). Madrid, España: McGraw-Hill.

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