Reenfoque Actitud con PNL

1-        Introducción        1

1.1 Reencuadre del contenido        5

1.1.1 Reencuadre del significado        5

1.1.2 Reencuadre del contexto        5

2-        Evaluación de las necesidades de aplicación        6

2.1 Uso general        6

2.2 Aplicación        7

2.2.1 Sesiones        7

2.2.2 Área de salud        8

2.2 Beneficio        8

3-        Elección del tema y desarrollo        10

3.1 Concepto de inconsciente en PNL        10

3.2 Reencuadre de contenido        15

3.2.1 Ejercicio: Reencuadre  de significado        15

3.2.2 Ejercicio: Reencuadre de contexto        16

3.3 Ejercicio: Reencuadre en seis pasos        16

3.4 Aplicación específica en al área de salud        23

4-        Documentos de calidad para la comunicación y aplicación        25

5-        Bibliografía        26

1. Introducción

«Una historia china habla de un anciano labrador que tenía un viejo caballo para cultivar sus campos. Un día, el caballo escapó a las montañas. Cuando los vecinos del anciano labrador se acercaban para condolerse con él, y lamentar su desgracia, el labrador les replicó: «¿Mala suerte? ¿Buena suerte? ¿Quién sabe?». Una semana después, el caballo volvió de las montañas trayendo consigo una manada de caballos. Entonces los vecinos felicitaron al labrador por su buena suerte. Este les respondió: «¿Buena suerte? ¿Mala suerte? ¿Quién sabe?”. Cuando el hijo del labrador intentó domar uno de aquellos caballos salvajes, cayó y se rompió una pierna. Todo el mundo consideró esto como una desgracia. No así el labrador, quien se limitó a decir: «¿Mala suerte? ¿Buena suerte? ¿Quién sabe?». Una semana más tarde, el ejército entró en el poblado y fueron reclutados todos los jóvenes que se encontraban en buenas condiciones. Cuando vieron al hijo del labrador con la pierna rota le dejaron tranquilo. ¿Había sido buena suerte? ¿Mala suerte? ¿Quién sabe?» – Extraído del libro «Sadhana, un camino de oración» - Anthony de Mello

El significado de cualquier acontecimiento depende de su contexto o estructura. Reencuadre (o su término original en inglés, reframing) significa literalmente «colocar algo en otro marco», lo que equivale a «reinterpretar». De hecho, es un procedimiento que varía nuestro modo de percibir un asunto, una conducta o un problema, dándole un significado nuevo.

A la hora de resolver un problema, una parte fundamental del aprendizaje creativo consiste en abandonar el marco opcional habitual. Al adoptar un punto de vista distinto, nuestros asuntos cambian de cariz y aparecen soluciones completamente distintas. A menudo la dificultad de aclarar nuestros desacuerdos con otras personas se debe a que, en lugar de trasladar la comunicación a un nivel más abstracto, hacemos girar la discusión continuamente en el mismo plano. Hablando de forma indeterminada sobre nuestros intereses, convicciones, necesidades, intenciones u objetivos, conseguiremos distanciarnos del problema concreto y, con el cambio de enfoque, encontraremos nuevas formas de solucionarlo.

El reencuadre es también el elemento fundamental en el proceso creativo: es la habilidad para situar un evento habitual en un nuevo marco que es útil y agradable.

En la teoría general de la comunicación, hay una axioma básico de que una señal sólo tiene sentido en términos del marco o contexto en el que aparece. Una luz en el campanario de la iglesia, simplemente es eso. Pero para Paul Revere significaba que los británicos venían, y también cómo venían: «uno si venían por tierra, y dos si venían por el mar». La luz sólo tiene significado en términos de las instrucciones previas que se establecieron en un marco, un contexto interno que crea el significado.

El reencuadre también aparece ampliamente en el contexto terapéutico. Cuando un terapeuta trata de conseguir que un cliente «piense las cosas de una manera diferente» o «mire desde un nuevo punto de vista» o «tome en consideración otros factores», estos son los intentos de replantear eventos con el fin de obtener que el cliente responda de manera diferente a ellos.

El reencuadre se puede utilizar con, literalmente, cualquier comportamiento o sentimiento que le gustaría cambiar.

1. Los comportamientos y hábitos. Cada uno de nosotros hace cosas que no nos gustan. Algunas personas tienen hábitos como fumar, beber o comer en exceso que causan problemas.

2. Los sentimientos o emociones. De vez en cuando todos tenemos respuestas que no nos gustan: sentirse enojado, deprimido, intimidar, impaciente, resentimiento, etc.

3. Los síntomas físicos. También puede ser muy eficaz cuando los síntomas físicos tienen un mensaje útil para nosotros. A veces un dolor de espalda, por ejemplo, puede ser un mensaje para reducir la velocidad. Un dolor de hombro puede estar diciéndonos que estamos tomando en demasiadas cargas. Una migraña puede estar diciéndonos que tenemos que tomarlo con calma y descansar más Después del reencuadre, muchas personas son físicamente más saludables porque tienen una forma de prestar más atención a los mensajes que sus cuerpos ofrecen. Responden a estos mensajes al reducir el estrés físico,-tomar un descanso, descansar más, hacer más ejercicio, cogiendo una mejor postura, etc.

Por todo ello, el reencuadre es una poderosa herramienta de comunicación.

Podemos diferenciar:

1.1 Reencuadre del contenido

Para aplicar correctamente el reencuadre del contenido es importante, como bien indica su nombre, conocer el contenido del problema, a diferencia de lo que ocurre con otros tipos de reinterpretaciones.

En la mayoría de los casos, el reencuadre del contenido es la respuesta a una queja. Existen dos procedimientos distintos. Por un lado, la reinterpretación del significado, operativa cuando se trata de lamentos del tipo «Siempre que ocurre X, mi reacción es Y...» («Cada vez que tengo que limpiar, me siento fastidiado»). Por el otro se halla la re interpretación del contexto, aplicable a la estructura «soy/estoy excesivamente Z» («Estoy demasiado gordo»).

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