SANIDAD FISICA

SANIDAD FISICA

ISAIAS 53:4-5

A pesar de todo esto, él cargó con nuestras enfermedades y soportó nuestros dolores.

Nosotros pensamos que Dios lo había herido y humillado.

Pero él fue herido por nuestras rebeliones, fue golpeado por nuestras maldades; él sufrió en nuestro lugar, y gracias a sus heridas recibimos la paz y fuimos sanados.

La enfermedad no es la voluntad de Dios, y nosotros como servidores tenemos que cubrir esta área con la presencia de Dios y el don de descernimiento de El.

• Dolor de cabeza y migraña.

• Mareos y problemas con el azúcar.

• Espasmos, neuralgias, Dolores de espalda.

• Jaqueca permanente, por poco descanso.

• La mala administración del tiempo, afecta la salud.

• Acidez estomacal, problemas de colon, digestión lenta. (desordenes en nuestra alimentación)

Lo más importante es identificar la puerta que tengamos abierta.

Nuestro deber es:

1. Pedir perdón por las puertas abiertas; los excesos en el trabajo, mala alimentación, falta de descanso.

2. Hacer proceso de perdón. Perdonándonos a nosotros mismos.

3. Pedir perdón por no cuidar el templo de Espíritu Santo.

4. Romper mentiras y argumentos mentales.

5. Romper ídolos de enfermedad. (Quejas)

6. Anular las maldiciones generacionales.

7. Aceptar el perdón de Dios y llevar nuestro cuerpo y nuestra vida a la cruz.

8. Consagrar nuestro cuerpo al Espíritu Santo. Posición en Cristo. Declaramos que nuestro cuerpo es un instrumento de alabanza vive en santidad y agrada a Dios.

9. Imponer manos y desatar sanidad, nosotros mismos.

10. Dar gracias a Dios por nuestro cuerpo bendiciéndolo y proclamando los beneficios de la cruz.

Salmos 103:1-3 (RVR1960)

Alabanza por las bendiciones de Dios

Bendice, alma mía, a Jehová, Y bendiga todo mi ser su santo nombre.

Bendice, alma mía, a Jehová, Y no olvides ninguno de sus beneficios.

El es quien perdona todas tus iniquidades, El que sana todas tus dolencias;

Éxodo 23:25 (NTV)

»Sirve sólo al SEÑOR tu Dios. Si lo haces, yo te bendeciré con alimento y agua, y te protegeré de enfermedades.

Santiago 5:14-15 (TLA)

Si alguno está enfermo, que llame a los líderes de la iglesia, para que oren por él; entonces ellos le untarán aceite[a] y le pedirán al Señor que lo sane. Si oran con confianza, Dios les responderá y sanará al enfermo, y si ha pecado también lo perdonará.

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