Sida y Enfermedades de Transmisión Sexual

Capitulo 21: Sida y Enfermedades de Transmisión Sexual

La teoría más aceptada en la actualidad sobre el origen del virus de la inmunodeficiencia humana (VIH), agente causal del SIDA, lo ubica en el centro de África, donde paso de los monos al hombre hace aproximadamente 150 años. Mucho se especula sobre la manera en que el virus pasó del mono al hombre en el continente africano; así se ha pretendido encontrar una explicación a ciertos acontecimientos de carácter antropológico. La sífilis tuvo su origen en Europa, su propagación estuvo determinada por la mezcla de poblaciones, la multiplicación de los medios de transporte, las prácticas sexuales, el uso masivo de drogas, entre otras. El SIDA ha recorrido el mundo en un periodo muy corto, la crisis social de los últimos decenios ha afectado de manera distinta a los diversos países, pero la presencia y magnitud del SIDA en cada uno de ellos es por igual alarmante. Las enfermedades de transmisión sexual (ETS), son padecimientos que se adquieren fundamentalmente por el contacto sexual, estas se encuentran entre las enfermedades infecciosas más frecuentes.

Su importancia y la necesidad de su control residen no solo en las infecciones agudas que provocan, sino también en las complicaciones y secuelas que las caracterizan, así como en el papel que desempeñan en la transmisión del VIH. Se conocen más de 20 microorganismos que se pueden transmitir por contacto sexual, pero los más comunes son seis: tres de ellos producen las consideradas ETS clásicas (sífilis, gonorrea y cancroide), y los otros tres son nuevas ETS (clamidia, infección herpética e infección por el virus de la inmunodeficiencia humana). Hoy en día sabemos que las enfermedades de transmisión sexual, en general y las ulceras genitales en particular, son facilitadoras de la transmisión del virus de la inmunodeficiencia humana, el agente causal del SIDA. Los principales retos en el terreno de las ETS como problema de salud pública, son: 1) Hacer accesibles los servicios clínicos eficaces; 2) Tener los fármacos apropiados para el manejo y lograr que los pacientes completen sus tratamientos y el de sus parejas sexuales; y 3) Estimular a las personas para que no adquieran una ETS. Las ETS pueden dejar como secuela la infertilidad y otras complicaciones en la capacidad reproductiva de la persona. Hoy en día la principal vía de contagio del VIH es la sexual; por esto, se puede considerar que en esencia el VIH/SIDA es fundamentalmente una enfermedad de transmisión sexual.

En el manejo del paciente con una probable ETS, es fundamental incluir en la historia clínica preguntas especificas sobre la conducta sexual, sobre las prácticas sexuales, el uso de anticonceptivos, la exploración física también debe utilizarse e incluir no solo una revisión minuciosa e la región genital, sino también de la cavidad oral, la región perianal, la piel y las regiones ganglionares. Todo el paciente al cual se le ha diagnosticado una ETS debe recibir la información, educación y asesoramiento necesarios, a fin de disminuir la posibilidad de adquirir nuevamente una ETS. Es conveniente manejar las ETS no con base en un diagnostico clínico o etiológico, sino en un diagnostico sindromatico. Los cuatro síndromes más comunes por considerar son: a) La secreción uretral en los hombres que es la molestia más frecuente en los hombres con ETS, b) El flujo vaginal en las mujeres, c) La ulceración genital en los hombres y en las mujeres, y d) El dolor abdominal bajo (pélvico) en las mujeres. En 1981 se diagnosticaron

...