Test Bender

Test de Bender

El Test de Bender está inspirado en la Teoría de la Gestalt sobre la percepción, particularmente en las investigaciones realizadas por Wertheimer, en 1932.

Lauretta Bender realizó las investigaciones para su test en el Belleuvue Hospital de New York. A partir de 1932 empezó a publicar sus resultados en la prensa especializada. El test Gestáltico de Bender fue bien aceptado por la crítica científica y pronto paso a ocupar un puesto de importancia en toda batería psicométrica contemporánea.

El objetivo de esta prueba es examinar la función gestáltica visomotora, su desarrollo y regresiones. Se debe presentar a los sujetos una colección de 9 figuras geométricas para que las reproduzca teniendo el modelo a la vista.

Nos permite hacer una exploración del retardo, la regresión, la pérdida de función y defectos cerebrales orgánicos, en adultos y en niños, así como de las desviaciones de la personalidad, en especial cuando se manifiesta fenómenos de regresión.

Este test se aplica a sujetos de 4 años hasta la adultez. Alrededor de los 11 años la mayoría de los niños son capaces de copiar los dibujos del test sin error.

Para este tipo de análisis deben observarse las características de la organización de las figuras sobre el espacio disponible, el grado de claridad de la reproducción, la adhesión o desvío de los modelos, las características de los contornos, de los elementos reproducidos. La colocación en el plano horizontal o vertical correcta o incorrecta, la orientación hacia la izquierda o hacia la derecha correcta o incorrecta, el grado de movimiento, la interrelación entre las figuras, el afán de perfección, formalismo, tendencia a las respuestas abstractas o concretas.

Todos los ítems del test se califican con 0 o 1 (sin error o con error). Se contabilizan sólo las desviaciones del patrón que son obvias. Todos los puntos se suman formando un puntaje compuesto con el que podremos acudir a las correspondientes tablas con datos normativos y establecer así en años la correspondiente edad de maduración viso-motora.

La autora utiliza cuatro categorías para clasificar los errores:

a) Distorsión de la forma

b) Rotación

c) Dificultades de integración

d) Perseveración

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