UNA MUERTE MUY DULCE

UNA MUERTE MUY DULCE

Es inútil pretender integrar la muerte a la vida y

Conducirse de modo racional frente a algo que no lo es;

Que cada uno se las arregle a su manera en la confusión de sus sentimientos.

(Simone, 2007)

La muerte lo único que tiene seguro todo ser vivo, es lo único que se haga para donde se haga uno la muerte llegará, tarde o temprano todo ser vivo muere, se extingue, se esfuma el aliento de vida, por más que se luche por más esfuerzos que se hagan el final llega y aunque es el destino de todo ser humano nos negamos a aceptar la muerte es algo a lo que se tiene miedo y que en alguna circunstancia de la vida uno llega a pensar hasta en cómo le gustaría morir si uno pudiera decidirlo quizás sería menos doloroso o de cierta forma seria como el plan final de la vida aunque quizá el temor de morir es por pensar en que hay después de la muerte o el hecho de que se termina la vida y por lo tanto todo se acaba: “La muerte es algo que no debemos temer porque, mientras somos, la muerte no es y cuando la muerte es, nosotros no somos (A. Machado)”. Algunas personas dejan seres importantes que aman, hijos, padres, hermanos amigos y estas relaciones afectivas son las que a una persona le duele dejar y desprenderse de un momento a otro. Simone dice:

“No hay muerte natural; nada de lo que sucede al hombre es natural puesto que su sola presencia pone en cuestión al mundo. Todos los hombres son mortales; pero para todos los hombres la muerte es un accidente y, aun si la conoce y la acepta, es una violencia indebida.”

Las relaciones afectivas considero que son la razón por la que más sufre uno, ya que en muchas ocasiones también son la razón de vivir, la vida del ser que

amamos es lo que también nos proporciona bienestar, felicidad y dicha a nuestra vida. Las relaciones interpersonales pero sobre las relaciones intimas que suele tener un individuo estas constituyen un aspecto básico de nuestras vidas, dado que ningún ser humano puede vivir en un aislamiento total de la sociedad de la cual quiera o no forma parte.

Y al formar parte de la sociedad y tener relaciones interpersonales, las cuales pueden terminarse debido a la muerte de uno de los dos, es como si la muerte nos robara a esa persona que nuestro corazón aprecia. Francois Mauriac dice:

La muerte no nos roba los seres amados. Al contrario, nos los guarda y nos los inmortaliza en el recuerdo. La vida sí que nos los roba muchas veces y definitivamente.

Cada ser humano tiene una perspectiva diferente de la muerte en muchas ocasiones debido a que el ser amado a sufrido tanto por alguna enfermedad casi hasta se implora la muerte para que ya no sufra tanto la persona enferma y por ello se dice que estuvo mejor que ya muriera, en otras ocasiones se justifica diciendo que ese era el plan de Dios para su vida, es una forma de minimizar el dolor, la perdida y la nostalgia de no volver a verle.

Por otra parte como menciona Simone B. “Si tiene como ahora unos días de felicidad, valdra la pena haberle prolongado la vida”, los días de felicidad son aquellos que hacen mas aceptable la muerte de cierta forma ya que se puede decir “he vivido, he disfrutado, puedo morir en paz” cuando uno llega a pensar en la muerte funciona también como reflexión de ¿Qué he hecho hasta hoy? Y que quiero hacer próximamente y de esa forma también aprovechar el tiempo y la vida para ser feliz o expresar a los seres que amo mi amor hacia ellos.

¡Hoy no he vivido! Esta frase del libro me encanto porque la mujer decía ¡Hoy no he vivido! Porque había dormido todo el dia, ese dia se le había escapado de las manos y no lo había disfrutado en ningún sentido ese dia paso como si no hubiese pasado, aprovechar cada minuto del dia y hacer algo durante el trayecto del sol

del oriente al poniente

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