Niño mueve corazones

NOVENARIO SANTO NIÑO MUEVE CORAZONES

Método para rezar esta novena

Hecha la señal de la Cruz, rezar un Padre nuestro y un Avemaría

ACTO DE CONTRICION

        Señor Dios mío, que bajaste del cielo por amor a nosotros, naciendo, viviendo y muriendo en la mayor pobreza, sólo para rescatarnos y para enseñarnos con tu vida y ejemplo el camino del cielo.

        Me duele de todo corazón el haberte ofendido y me propongo, ayudado con tu Divina Gracia, no volver a disgustarte más, con pecado mortal alguno.

** POSTERIORMENTE SE REALIZA LA SIGUIENTE ORACIÓN**

ORACIÓN PARA TODOS LOS DIAS

        Preciosísimo Niño Jesús mueve corazones, que has venido a éste mundo para mover mi corazón y traerlo hacía Ti; tus finezas para conmigo y las perfecciones admirables que Dios encerró en tu nombre, forman las redes benditísimas que hechas en el mar cenagoso de éste mundo, para cautivar mi pobre corazón.

        Concédeme, te lo ruego, que al contemplar tus encantos en éste novenario, mi inteligencia se ilumine y mi corazón vuele hacia el tuyo amorosísimo que es depósito de todas las gracias, para escoger entre ellas las de…… (Pedir la gracia que se desea obtener) si es para mayor gloria tuya y bien de mi alma. Amén.

ANTÍFONA

        Está dotado de una hermosura que supera a la de todos los hijos de los hombres.

V.- Con esa gallardía y hermosura.

R.- Camina, avanza prósperamente y reina.

DÍA PRIMERO

        Divino Jesús, pimpollo del Señor, que siendo Dios quisiste brotar del tallo de tu Madre Santísima, para santificarte y engrandecerme. Has que atraído por el aroma de tus virtudes y envuelto en la hermosura de tu gracia, consangre mi vida a la práctica de las obras que llevan al cielo. Amén.

** tres Padrenuestros y Avemarías, pidiendo la gracia que se desee conseguir; terminar con la siguiente**

ORACIÓN FINAL PARA TODOS LOS DÍAS

        ¡Oh Niño Divino mueve corazones! Esos corazones dichosos que contemplo en tus manos como un trofeo arrancado a tus enemigos, aumentan poderosamente mis deseos de amarte.

        Coloca también mi corazón y el de mis deudos, en tus manos, en tus ojos, en tus mandamientos y en tu Corazón, para que por tu humanidad adorable, seamos llevados a contemplar tu divinidad en el cielo. Amén.

** Un Padrenuestro y un Avemaría, pidiendo que el amor de Jesús muevo todos los corazones. **

SEGUNDO DÍA

**Todo como el primer día, menos la oración propia**

        ¡Oh Jesús amabilísimo!, que te adornaste con todos los encantos de la humanidad, para aumentar mi amor y los abrillaste con gloriosas llagas para ser mi camino.

        Ya sé que Tú eres el padre de esos grandes dolores, en que el corazón se olvida de sí mismo, para bien del amado; pero yo me amedrento al sentir las asperezas de ese camino.

        Mueve mi corazón hasta hacerle saborear la dulzura de tus llagas, comprender la sublimidad del sacrificio, a fin de que olvidado de mí mismo, y entregado al amor de Dios y del prójimo, cruce animoso al desierto de éste mundo y llegue a tu celestial paraíso. Amén.

** Terminar igual que el primer día **

TERCER DÍA

** Todo como el primer día, menos la oración propia**

        ¡Oh Jesús! Buen Pastor de las almas, que conoces a tus ovejas por sus nombres, que sacrificas tu vida por ellas y las apacientas en los pastos de la vida eterna.

        No me dejes caer en los brazos que el demonio me tiene para darme la muerte; antes bien; sea tu redil morada y abrigo, tus pastos mi alimento, tu callado tu protección, y tu corazón de Buen Pastor, mi eterna recompensa. Amén.

**Terminar igual que el primer día**

CUARTO DÍA

** Todo como el primer día, menos la oración propia**

        ¡Hermosísimo Niño Mueve Corazones! Sostenedme siempre, para que no caiga jamás en pecado mortal. Concédeme la gracia de cumplir con todas mis obligaciones de cristiano, y de no apartarme jamás de Vos, por fuerte y violenta que sea la tentación.

        No permitas que por mi causa alguien padezca o se escandalice; antes bien, dame la gracia de cooperar a la salvación de las almas con mis oraciones, con la palabra y el buen ejemplo.

        ¡Oh dulcísimo Jesús!, otorgadme lo que os pido, por el amor ardiente que os movió a derramar por las almas toda vuestra sangre. Amén.

**Terminar igual que el primer día**

QUINTO DÍA

** Todo como el primer día, menos la oración propia**

¡Oh benignísimo Jesús mío! Cordero de Dios, que con infinita mansedumbre padeces todavía  los tormentos de la cruz, en la que tienen clavada la crueldad de tus hermanos y el odio de tus enemigos.

        Verdaderamente eres el Cordero de la ley antigua, al que todos despedazaban. Infunde en mi corazón orgulloso, tu mansedumbre divina, que perdonó a María Magdalena, abrazó a Judas el traidor y oró por los verdugos que te crucificaron,  fin de que según tus promesas, hoy posea la tierra y mañana al cielo. Amén.

**Terminar igual que el primer día**

SEXTO DÍA

** Todo como el primer día, menos la oración propia**

        ¡Oh divino amante de las almas!, a quien el profeta David contempló como el centro de todos los corazones, y el Amado de todas las naciones.

        Mueve mi corazón y el de todos los hombres, para que amándote en todo y sobre todas las cosas, cantemos a tu gloria en ésta vida y gocemos de tu felicidad en la otra. Amén.

**Terminar igual que el primer día**

SEPTIMO DÍA

** Todo como el primer día, menos la oración propia**

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