Planeta tierra

S.O.S. TIERRA

El planeta tierra, está siendo explotado desmedidamente en sus recursos naturales por parte de la humanidad.

Mientras el hombre avanza en sus conocimientos científicos, tecnológicos, producción y fabricación de distintas índoles, usando los recursos naturales para conseguir sus propósitos, se va generando un desgaste y destrucción de los medios naturales, se arrasa con grandes porciones de territorios forestales que van desapareciendo en nombre del avance de un nuevo futuro.

Estos hechos a su vez no solo acarrean problemas en el medio ambiente, sino que también en este desmedido progreso, repercute en la economía de muchas poblaciones.

Los países con una economía estable, en la actualidad son pocos, el maltrato a los recursos naturales son muchos, mucha gente afectada ambientalmente y económicamente.

El ser humano necesita hacer un alto en esta destrucción de nuestro hogar, debemos ser conscientes de lo que hacemos y comenzar verdaderamente a sanar, cuidar y preservar nuestro planeta.

 ¿Hasta cuándo el planeta nos aguantara con todo este desastre?

El avance en tecnología y distintos recursos que usa el ser humano en la actualidad está dejando grandes y graves consecuencias en la naturaleza. La contaminación del agua, las tierras y todo aquello natural que nos da sustento, el ser humano se está encargando de desaparecerlo.

Lo que está pasando en nuestro hogar común

El Papa Francisco identifica los apremiantes problemas ecológicos modernos: La contaminación del medio ambiente y el cambio climático (§§20-26); El tema del agua (§§27-31); La pérdida de biodiversidad (§§32-42); Disminución de la calidad de vida humana y la destrucción de la sociedad (§§43-47); y la desigualdad global (§§48-52 ). Con respecto al cambio climático, el Papa Francisco:

» Enfatiza que el clima es un bien común, de todos y para todos. Hay un consenso científico muy

consistente que indica que nos encontramos ante un preocupante calentamiento del sistema climático debido principalmente a actividad humana. (§23)

La tierra grita pidiendo auxilio, necesita ser cuidada, reparada, amada. esos gritos provienen de aquellos hermanos que sufren las consecuencias del gran saqueo que se hace de este mundo. poblaciones sufriendo la contaminación de sus aguas con químicos y residuos tirados en los recursos hídricos, que riegan nuestras tierras, la cual se siembra y cosecha los productos, recursos hídricos que sacia nuestra necesidad de aseo y consumo hidratante en nuestro organismo esencial para vivir. Poblaciones que tienen su medio ambiente contaminado por fabricas que emanan fuertes olores, despidiendo partículas que vuelan por el aire llegando al organismo, perjudicando la salud de la gente, se podría nombrar aún más causas que dañan nuestro planeta y que repercute en una población.

La Iglesia en esta problemática de la contaminación ambiental, nos llama a tomar conciencia de que todos somos responsables en administrar los bienes naturales que Dios nos regala. Él nos instruye a “cultivar y cuidar” de la creación (Génesis 2,15).

En estos tiempos se alza más la voz para llegar a crear conciencia en todos los que habitamos este mundo.

Podemos citar lo que dice la encíclica Laudato Si» Todos los seres humanos son creados únicos y llamados a ejercer un gobierno responsable sobre la creación en nombre del Creador. (§67- 68).

Que bondad la de nuestro Dios hacernos administradores de su creación, cuanta educación necesitamos para aprender a cuidar lo propio que es de todos, a sabernos coparticipes de una creación inigualable que solo el ser humano tiene la responsabilidad de preservar.

Raíz Humana de la Crisis Ecológica: 

Inspirado por fe cristiana, el Papa Francisco se refiere a “las raíces humanas de la crisis ecológica” Específicamente:» Critica “el antropocentrismo” – la creencia que los seres humanos son radicalmente separados y por encima del mundo natural y no-humano. (§§115-118).

Acertadas las palabras del Papa Francisco en la encíclica Laudato Si, podemos citar como así también a San Juan Pablo II, en la carta encíclica Centesimus Annus (CA), publicada en 1991, es en el orden respectivo, la tercera carta, doctrina social escrita por el romano pontífice.  El motivo de su publicación está relacionada con la celebración de los cien años de la Rerum Novarum. El Papa Vincula el consumismo a la Situación ecológica que padece El Mundo. Asocia las raíces de la crisis ecológica a un error antropológico producido por el deseo de tener y gozar, más que de ser y de crecer, de consumir de manera excesiva y desordenada los recursos de la tierra y su misma vida (n. 37). Para el Papa es evidente que las relaciones existentes entre ser humano y naturaleza no responden al plan dado por Dios, nos dice: El hombre, que descubre su capacidad de transformar y, en cierto sentido, de crear el mundo con el propio trabajo, olvida que éste se desarrolla siempre sobre la base de la primera y originaria donación de las cosas por parte de Dios. Cree que puede disponer arbitrariamente de la tierra, sometiéndola sin reservas a su voluntad como si ella no tuviese una fisonomía propia y un destino dados anteriores por Dios, y que el hombre puede desarrollar con certeza, pero que no debe traicionar. En vez de desempeñar su papel de colaborador de Dios en la obra de la creación, el hombre suplanta a Dios y con ello provoca la rebelión de la naturaleza, más bien tiranizada que gobernada por él (Juan Pablo II, 1991, n. 37).

El ser humano ha llegado al extremo en esta autodestrucción podría decirse, pero podríamos añadir también que somos personas capaces de revertir esta situación, nos queda ir en contra de todo un sistema económico que nos agobia que nos empuja al consumismo que nos pasa por encima. Por ello también debemos ser partes de políticas ambientales que nos ayuden a protegernos y proteger a nuestra tierra.

Podemos nombrar algunos de los movimientos ambientales que hoy en día son conocidos mundialmente.

La acción de los organismos no gubernamentales en temas ambientales

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