Quien dio los mandamientos al hombre: Dios le dio a moisés los 10 mandamientos; Jesucristo los confirmo con su enseñanza y con el ejemplo de su vida y la iglesia los enseña como camino para la felicidad.

Barbacoas26 de mayo de 2016

Objetivo 3 Los mandamientos de la ley de Dios

Quien dio los mandamientos al hombre: Dios le dio a moisés los 10 mandamientos; Jesucristo los confirmo con su enseñanza y con el ejemplo de su vida y la iglesia los enseña como camino para la felicidad.

Como se resumen los 10 mandamientos: Jesucristo resumió los mandamientos diciendo “amaras a tu al señor tu dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con todas tus fuerzas; y amaras a tu prójimo como a ti mismo” (Lucas cap 10-27)

Porque es importante vivir plenamente los mandamientos: vivir plenamente el amor de Dios y al prójimo es indispensable para el anuncio del evangelio. Los cristianos hacen creíble la enseñanza de Jesucristo e impregnan el mundo  del espíritu del señor.

1. Amar a Dios sobre toda las cosas: El primer mandamiento, amar a dios sobre toda las cosas quiere decir creer en dios esperarlo todo de él y amarlos con obras cumpliendo los q nos manda. Además, adorarle y reconocerlo como creador y señor de todas las cosas.

Este primer mandamiento nos prohíbe confiar en dioses falsos, despreciar las verdades de la fe ignorándolos o rechazándolas, y desconfiar de la misericordia de Dios. Este mandamiento nos prohíbe también recibir los sacramentos sin las debidas disposiciones.

1. No tomar el nombre de Dios en vano: Este mandamiento nos manda a respetar el nombre de Dios porque su nombre es santo. Se honra el nombre de Dios invocándolo al levantarse y acostarse, antes y después de comer en las principales acciones de cada día. Un modo practico es haciendo la señal de la cruz, mientras se dice: en el nombre del padre del hijo y del espíritu santo
2. Santifica las Fiestas: Este mandamiento nos manda a dar culto a Dios los domingo y día de precepto la iglesia manda al cristiano a vivir religiosamente el domingo o día del señor por la participación de la misa o eucaristía también. También manda abstenerse de aquel trabajo u ocupaciones que impidan dar culto a Dios. Son días para practicar  las obras de misericordia de Dios y de descanso para la mente y para el cuerpo
3. Honrar a padre y a madre: El cuarto mandamiento nos manda a respetar y honrar a nuestros padres y familiares, y a todos los mayores de edad dignidad y gobierno. Los hijos deben honrar a sus padres de todo corazón ser agradecido por el don de la vida y cuidar de ellos cuando los necesiten
4. No mataras: Este mandamiento nos manda a respetar la vida propia y ajena, hasta en los más pequeños detalle toda vida humana hay que respetarla porque es sagrada, es un don de Dios. Toda vida humana es amada por Dios porque está hecha a su imagen y semejanza
5. No cometer acto impuro: Este mandamiento no manda que seamos puro y castos en nuestras palabras y acciones porque la gracia de Dios y la ordenación de nuestros afectos nos hace miembros vivos de Cristo y nuestro cuerpo es templo del espíritu santo.
6.  No Robaras: Este séptimo mandamiento nos manda a practica la justicia y la caridad en el uso de los bienes y terrenos y en los frutos del trabajo este mandamiento nos prohíbe todas la acción en contra de los bienes del prójimo o del estado, como el robo, la corrupción, la usura, el fraude, y todo manera de retener injustamente los bienes ajenos
7. No dirás falsos testimonios ni mentira: Este octavo mandamiento nos manda a decir siempre la verdad y respetar la fama del prójimo. Este mandamiento nos prohíbe la mentira, la calumnia , la murmuración, la difamación el falso testimonio la maledicencia y toda la elección contra la fama del prójimo
8. No cometer pensamientos ni deseos impuros: Este noveno mandamiento nos manda que seamos limpios y puros en nuestros pensamientos y deseos solo pecamos cuando nos detenemos voluntariamente en la ocurrencia. La voluntad debe  rechazarla siempre prontamente
9. No codiciar los bienes ajenos: Nos manda hacer agradecidos con Dios con los bienes materiales que nos ha dado y con los que honradamente podríamos adquirir. El decimo mandamiento nos prohíbe la avaricia o deseo desenfrenado de bienes terreno y la envidia, que es la tristeza por el bien ajeno son pecados que cuando dominan el hombre les causa un grave daño

Los mandamientos de la iglesia

Concepto

Importancia

Clasificación

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