Apostoles

Apóstoles, profetas y posesión demoníaca

Su relación en la actualidad

Quien haya tenido la mala fortuna de ingresar a alguna iglesia pentecostal, de esas que tienen profetas, apóstoles y demás, habrá notado como la gente grita, se desarma en el piso y hace todo tipo de tonterías mientras se les ministra con gritos y palabras extrañas. Esto no ocurre en todas las iglesias pentecostales, pero sí en las que mas han triunfado o que mas seguidores tienen. En muchas de estas congregaciones tienen el combo completo de “apóstol-profeta”.

Desmenucemos esos términos. Apóstol, según la Biblia, son los hombres elegidos por Jesús y que lo vieron resucitar. Las características de un verdadero apóstol son las siguientes:

• Haber conocido a Jesús.

• Haber sido escogidos y enviados por Jesús.

• Haber sido testigos de Jesucristo resucitado.

• Dar la vida por Dios y por el evangelio.

• Seguir a Jesucristo.

¿Ninguno de los supuestos apóstoles que existen en la actualidad pudo ver vivo a Jesús ni fueron testigos de su resurrección, por lo que no pueden ser verdaderos apóstoles sino que son obreros fraudulentos. Es por esa razón que en cada ciudad hay un número mas grande de apóstoles que los que nombra la Biblia. Sólo en mi ciudad hay como 20. Al parecer da buen dinero ser apóstol.

En las iglesias de hoy también encontramos profetas y profetisas que son los que describen los acontecimientos futuros. También están llenas las iglesias de estos delincuentes. Se los puede identificar porque no profetizan nada que uno no sepa. A esto se le suma que hablan en lenguas, por ello las personas los toman como seres espirituales y se creen el cuento.

La cosa es exactamente al revés. No son apóstoles porque no encajan en la descripción bíblica de apóstol y no son profetas porque lo que dicen no está acorde a la escritura. De hecho ellos pueden conocer algo de su vida y usted les creerá, sin embargo es un don que les da el demonio a sus súbditos.

¿Cuántas veces hemos visto a personas hablar en lenguas? Seguramente muchas. Esas lenguas no es que sean falsas, son lenguas angelicales, pero de ángeles caídos. Tenga mucho cuidado cuando estas personas hablen en lenguas porque le están ministrando espíritus inmundos. Por esa razón no hay traductor que nos explique cómo exige Pablo.

El apóstol Pablo enseña que si no hay intérprete es mejor callar en la congregación, pero ellos no callan, ellos ministran espíritus inmundos con su lenguaje. De la misma forma que hay lenguas angélicas (de ángeles del Señor), hay lenguas angélicas de demonios. Recuerde que los demonios son ángeles caídos y, por lo tanto, tienen las mismas atribuciones que los ángeles de Dios, inteligencia, poder y todo tipo de habilidades. También tienen su propio lenguaje. Ése es el que muchos predicadores están transmitiendo a los desprevenidos fieles. Por esa razón, los que asisten a cultos pentecostales, caen como si les hubiesen metido diez balazos, ríen como si le hicieran cosquillas, gritan, se revuelcan en el piso, vomitan, etc.

Tenga cuidado porque hay un fenómeno que se llama “xenoglosia” que consta de hablar una lengua extraña sin haberla aprendido. Si su pastor habla en una lengua extraña, por ahí está poseído, no bendecido. También pueden saber cosas ocultas de usted porque los demonios conocen esas cosas. De allí viene la palabra “demonio” de “conocimiento”.

Los casos de posesión demoníaca son muchas veces difíciles de detectar. Por ahí usted puede ver una persona que ora y empieza a temblar y usted piensa “wow que espiritual que es” ya que relaciona eso con que el Espíritu Santo entra en su cuerpo, pero no. El Espíritu Santo ya vive y mora dentro de todo cristiano y ese temblequeo es cuando un espíritu inmundo entra en lucha contra el Espíritu Santo dentro del mismo cuerpo de la persona. Por eso en las iglesias, caen, gritan, lloran.

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