Encarnacion De Jesus

ENCARNACIÓN DE JESÚS

Para los cristianos y cristianas el acontecimiento de Jesús no sólo es un hecho histórico, sino el más significativo, puesto que consideran que Jesús es la encarnación de Dios, como lo afirma el capítulo 1 del evangelio de San Juan:

“El Hijo de Dios nacido de María la Virgen estaba desde el principio en Dios; en Él apareció la bondad y la amistad de Dios hacia los hombres. La Palabra se hizo carne para que nosotros llegáramos a ser Hijos de Dios. Se hizo nuestro hermano para que todos fuéramos hermanos y nos amemos fraternalmente” (Catecismo Básico para Adultos, pág. 86).

El misterio de la Encarnación del Hijo de Dios constituye sin lugar a dudas el acontecimiento central del cristianismo; así lo comprendieron los autores sagrados del Nuevo Testamento y la Iglesia lo expresa en los Concilios de Nicea, Caicedonia, Lateranense, Vaticano I y Vaticano II. Este acontecimiento de la Encarnación, en síntesis, significa que Jesús es el Hijo Único y eterno de Dios, hecho hombre de la Virgen María, por obra y gracia del Espíritu Santo, para redimir la humanidad de la esclavitud del pecado y para restablecer la relación definitiva con Dios.

Para la comunidad cristiana, el gran significado de la Encarnación radica en que por ella el Hijo de Dios se identificó con todos los seres humanos en todo menos en el pecado, es decir, trabajó como los humanos, reflexionó como los humanos, actuó con voluntad humana y amó con corazón humano; Jesús sintió frío, cansancio, dolor, compasión, hambre, como todos nosotros. Gracias a esta identificación del Hijo de Dios con la humanidad, se puede afirmar que es modelo o paradigma de realización del ser humano.

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