Ensayo Nuestra Señora de Guadalupe.

Buenas noches a todos.

Nuestra Señora de Guadalupe.

Antes que nada, agradecer de corazón la oportunidad y el honor, que nos llena de orgullo como miembros de esta comunidad parroquial de dar las gracias por hermosa visita de una mujer grande, dulce y digna.

Es una visita especial que nos haces, en la cual preparamos todo para ser acogedores, especial preparación de ésta, otra casa que vienes a visitar, el altar que cada persona de El Pinar te tiene preparado en su corazón. Altar que preparamos ansiosos a tu visita madre, por que quién no tiene a su madre en el altar del corazón.

Gracias María de Guadalupe por entrar en nuestro segundo hogar, gracias por querernos, gracias por ayudarnos a tener la fe que Tú tuviste, gracias madre, por ser con nosotros una Madre.

Virgen de Guadalupe, en tu peregrinar por las casa y lugares de trabajo de El Pinar, te dignaste visitarnos en nuestro segundo hogar. Gracias, Nuestra Señora de Guadalupe.

Al despedirnos en este momento, te agradecemos, Madre, el tiempo que has estado con nosotros, y todo el amor y las gracias que nos han llenado con tu presencia. Envuélvenos con tu ternura, y sigue ayudándonos en nuestras necesidades del cuerpo y del alma. Gracias, Señora de Guadalupe, Patrona de la Parroquia Florencio Ramírez, por tu amor maternal, por tu delicadeza y por tu cariño.

Permítenos, Señora nuestra, que proclamemos con descaro filial que eres la belleza de Dios, la mejor obra de sus manos, la manifestación completa de su ternura y la plenitud de su gracia.

Sra. Ntra. de Guadalupe, aunque, dentro de poco, vas a cruzar la puerta de nuestro templo, en dirección contraria a la de hoy, quédate entre nosotros; guíanos; bendice esta parroquia y a cada una de sus familias; cuida a nuestros niños; orienta a nuestros jóvenes; sana a nuestros enfermos; alcánzales trabajo a quienes no lo tienen.

¡Gracias, Nuestra Señora de Guadalupe, Gracias!

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