Los Mejores Versículos En La Biblia.

“No dije que no fuera divertido.” Responde pero decido dejar el tema, no quería saber más, quería a mi gato de vuelta. “¿Quieres saber por qué me quedé contigo cuando pude haberme transformado en humano e irme?” pregunta sentándose en mi regazo, justo como lo hacía antes, ignoro el hecho de que ahora tengo un pene sobre el mío, asiento y le escucho.

“Porque me gusta como hueles.” Mete su cabeza dentro de mi cuello, siento su nariz olfatear mi piel, mordisquea y lame toda esa región de mi cuerpo. Muerdo mi labio cuando su cola se enreda en mi brazo, no lo había mencionado antes pero él es increíblemente atractivo, todo lo que estaba haciendo se sentía caliente no había otra palabra para describirlo. En el siguiente momento me encuentro tomándolo de la cintura –que ni se le ocurra separarse.- Y me encuentro agradecido de haber estado usando pantalones sueltos porque de lo contrario hubiera estado llorando, la erección que tengo ahora mismo era lo suficientemente dolorosa encontrándose en el culo de Levi.

No lo puedo creer, este no puede ser mi gato. Este hombre que ahora mordisquea uno de mis pezones no puede ser mi gato.

Subo la mano que no está enredada por su cola para acariciar la parte de atrás de su oreja, se sentía raro pero eso no fue realmente en lo que me concentré cuando lo hice y Levi saltó sobre mi erección gimiendo de la satisfacción.

“Mierda.” Maldice volviendo a realizar fricción entre él y yo, jadeo todavía acariciando la parte de atrás de sus orejas. “Deja…de…hacer…eso.”

Necesitaba tener más contacto, como pude bajé mis pantalones finalmente liberándome.

“No está mal para un mocoso.” Dice mirando mi miembro. “Sabes que no voy a dejar que me folles ¿Cierto?”

“Por favor., sólo…” Posiciona mi erección justo en el medio de su culo sin darme alguna oportunidad de entrar en él.

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