Santa Cena Desde La Perpectiva Mormona
Enviado por eric_7lds • 26 de Abril de 2013 • 2.440 Palabras (10 Páginas) • 406 Visitas
Nacer de nuevo:
Ciertamente este es un principio doctrinal de salvación para la raza humana, que consiste en la aceptación y ejercicio de los primeros principios y ordenanzas del evangelio de Jesucristo. Sin embargo, el proceso de nacer de nuevo puede no completarse al instante del bautismo y la confirmación, debido a que el individuo no se ha arrepentido de sus pecados y transgresiones pasadas y siente un deseo de mantener su apariencia pasada( piercing, arracadas, aretes en el caso de los hombres, tatuajes borrables, etc.); así como en el modo de vestir( blusas de tirantes, tops, pantalones apretados, vestidos pegados, escotes pronunciados, minifaldas, etc.); también en la forma de hablar( groserías, señas con las manos, etc.) que el individuo acarreaba antes de conocer el evangelio; o en otras palabras “el hombre [ y la mujer] natural es enemigo de Dios y lo ha sido desde la caída de Adán y lo seguirá siendo hasta que se someta a la voluntad de Dios y se vuelva como un niño, manso, humilde, dispuesto a someterse a todo cuanto el Señor juste conveniente imponer sobre él, tal como un niño se somete a su padre”.
Otra Razón por la que el individuo no completa el proceso de conversión es que el Espíritu Santo viene sobre el individuo cuando es el momento adecuado de allí que las palabras recibe el Espíritu Santo “Son una declaración solemne de que el individuo es candidato para tener a este compañero constante y no un mandato para que el Espíritu descienda de inmediato y more en la persona; o como lo dijo el Salvador a Nicodemo: de donde el viento sopla , nadie sabe a donde va ni de donde viene , así es el Espíritu” Así que cuando el Espíritu venga entonces testificará – o en otras palabras—justificará la ordenanza ante el Cielo y entonces: “Por la sangre [la persona es ] santificada”(Moisés 5:59) y esto no siempre ocurre en el instante de la confirmación y mas aún si se trata de los descendientes de Jafet o de Cam, ya que su sangre debe ser purgada hasta que se vuelva a semejanza de aquél que es descendiente de Sem y, por tanto, hijo de Abraham.
Por otro lado hablemos de aquellos que han llegado a ser santos de los últimos días y de la necesidad que estos tienen de nacer de nuevo constantemente, sí, muchos de nuestros hermanos y hermanas asisten a las reuniones dominicales a fin de participar de la santa Cena, donde, a través de ella la persona es limpiada de nuevo, es decir, nace de nuevo. Hasta este punto quiero aclarar que este es el modelo ideal que es la doctrina Del Padre y Del Hijo y Del Espíritu Santo. Así pues, es con todos aquellos que se sujetan a la luz del evangelio, pues ciertamente se salvarán, pues son limpiados por la sangre del Cordero de Dios.
Pero por otro lado, también hay entre las congregaciones de los santos aquellos que poco o nada saben acerca de Nacer de Nuevo, pues asumen que es a causa de su bautismo y confirmación que Dios está obligado a perdonar sus pecados cada vez que ellos asisten para tomar la santa cena sin mencionar que a veces lo hacen sólo por mera costumbre, si, es como el sistema mojigato de religión que vivían los judíos en los días del nacimiento de Cristo donde suponían que la simple observancia de la ley los salvaría, por lo que el salvador mismo los condenó a ellos y mandó a los Nefitas en el hemisferio occidental diciendo “…Y me ofreceréis como sacrificio un corazón quebrantado y un espíritu contrito” es decir que el tomar la santa cena debe hacerse con sinceridad de corazón y esto aplica para todo principio y doctrina de Cristo.
Hoy día este mandamiento ha pasado por alto en no pocas reuniones sacramentales donde, hay un número cada vez mayor de Santos que no dan el valor adecuado a la Santa ordenanza, dando por sentado que Dios los ha perdonado por estar allí y comer el pan y beber el agua. Sin embargo, quiero expresar mi amor hacia estos, y aclarar que muchos hacen esto por mera ignorancia [pecado de omisión] y por tanto, no los juzgo.
Durante la semana estos santos no se esfuerzan al máximo por agradar al Señor y ellos o sus hijos se apartan de los mandamientos de Dios; por lo que el espíritu que llevan dentro carece de alimento espiritual y va muriendo, y como consecuencia: al llegar a la capilla el domingo se vuelve normal que no hallan leído su clase de la escuela dominical y que no leyeron su clase de la sociedad de socorro o de sacerdocio, tampoco hacen un esfuerzo por participar y ya ni se diga de tener deseos de buscar una escritura y leerla en voz alta sin que se lo pidan o siquiera explicar lo que leyó. Y así transcurren las semanas en las que no se cultivan y su espíritu muere, y pasan los domingos tomando la Santa Cena sin que surta un verdadero efecto , y a eso le sumamos que el Maligno les susurra al oído y se vuelven apáticos al grado de que los domingos saludan solamente a sus “ amigos”; y hacen todo por no saludar --y hasta me atrevo a decir-- que hasta evaden a aquellos que son investigadores o recién conversos , y ya ni se diga “De aquellos que son mas humildes a causa de su pobreza” porque actuarían como los zoramitas, sí, y llegan a ser disidentes en la misma congregación, y dicho en otras palabras “ son lobos rapaces vestidos con ropas de corderos. Son estos los que tienen ojos y no ven , oídos y no oyen, lengua, mas no hablan ; un corazón, mas no sienten; sí , pues han dejado de sentir y “huellan con los pies al Santo” . Y esto no lo hacen en la ignorancia, pues saben que se hallan” En la hiel de la amargura…”
No es de sorprender que esta clase de santos se les halle a diferentes escalas: unos mas chismosos que otros; algunos más rebeldes que otros; en su mayoría más murmuradores que otros; unos más orgullosos que otros… Y todos ellos sirven al diablo, sí, el padre de todas s las mentiras, la serpiente antigua, y llegan a ser hijos de él, sí, por cuanto obran con mentira y artificios y señales para cegar y” Engañar aún si fuera posible a los escogidos”, mas estos – siendo hijos del diablo—tendrán su recompensa, a saber, el infierno. Y esto, repito, por cuanto no lo hacen en la ignorancia.
Estos rebeldes detienen el progreso de la iglesia, pero, sin embargo, digo, con toda autoridad, que jamás detendrán el destino de ésta. Por tanto ¡Deben arrepentirse!
Dios el Padre de todos los espíritus, en su misericordia, ha llamado profetas, enviado Ángeles, obrado maravillas y milagros entre todo pueblo con objeto de que esperen la venida de Su Hijo y, ahora, en estos días su Brazo se ha extendido sin límites y “Toda carne
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