Definición diseño

Definición diseño

Es una actividad que no tiene parámetros absolutos; su definición es un tema inagotable de acepciones determinadas por el tiempo y el espacio histórico donde se desarrolla, así como del contexto sociocultural donde se engendre. Nada se crea, sin antes haber sido estudiado en cada uno de sus aspectos. Considerando los problemas conceptuales y de significado acerca de la definición del diseño, de lo que no cabe la menor duda es que el diseño es una práctica en la que se forjan y determinan ideas y formas que han de materializarse posteriormente mediante procedimientos manuales y mecánicos.

El diseño es una disciplina social y humanística; una disciplina de concebir, planear y realizar las comunicaciones visuales que son necesarias para resolver y enriquecer las situaciones humanas. Directamente relacionado con la vida urbana y del desarrollo tecnológico, el diseño no se ciñe a técnicas, métodos o teorías determinadas, sino que es la capacidad de deliberar sobre ellas y sobre la innovación, para crear escenarios donde la producción de imágenes/objetos incide sobre la vida de la gente, sus conductas de consumo, sus hábitos de lectura y sus necesidades de información.

El diseño es una disciplina social y humanística; una disciplina de concebir, planear y realizar comunicaciones visuales, buscando resolver y enriquecer situaciones humanas a través de un resultado final al cual llegaremos a través de un proceso cuyo objetivo es buscar una solución idónea a cierta problemática particular respondiendo a una significación, una forma, que representará el medio por el cual se expresará nuestro producto y a una función, es decir, la necesidad que se busca cubrir dependiendo del área del diseño. Todo esto, a través del uso de técnicas que, si bien son herramientas, no se limita al uso de estas sino que se delibera e innova a partir de ellas para así poder llegar a escenarios donde su producción culmina en objetos e imágenes materiales que incidirá sobre la vida de la gente, sus conductas de consumo, hábitos de lectura y necesidades de información. Es necesario que el diseñador conozca muchos aspectos tecnológicos, leyes y métodos como herramientas para la producción de su producto, actuando generalmente bajo los parámetros del contexto histórico y sociocultural de la época.

De lo que no cabe la menor duda es que el diseño es una práctica en la que se forjan y determinan ideas y formas que han de materializarse posteriormente mediante procedimientos manuales y mecánicos.

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