Los vehículos del futuro

Los vehículos del futuro

     Algunas compañías en la actualidad se dedican a proyectos de investigación y fabricación de vehículos autónomos, aquellos que son capaces de imitar las capacidades de manejo y control de un humano, a partir de reconocer el ambiente que los rodea por medio de sensores, sistemas computacionales y aparatos electrónicos, los más famosos son el proyecto de Google o el de la universidad libre de Berlín. El objetivo del presente escrito es dar a conocer las diferentes opiniones y posturas con respecto al surgimiento e implementación de esta tecnología; rama de la inteligencia artificial. La importancia de esta investigación radica en el funcionamiento del sistema de estos vehículos, y la seguridad o inseguridad que su implementación representa. Asimismo este trabajo pretende demostrar que a pesar de lo innovador de esta tecnología, el gran avance de la inteligencia artificial, y el beneficio que aporta a los conductores, aún no están listos para rondar por las calles y avenidas de entornos reales. Los autores que sustentan los argumentos de este ensayo son David Rubia, Eduardo Martínez, Universidad Abierta de Cataluña, Antonio Sabán, y EL FINANCIERO.

     David Rubia (2011) informa que Nadie sabe el funcionamiento específico de los vehículos autónomos excepto las compañías que los fabrican, lo que si se conoce son algunas de las características base, estas son: GPS tecnología que estos automóviles utilizan a profundidad ya que hace posible la ubicación del vehículo con una precisión de 30 cm; radares, detectan los obstáculos que puede haber en el trayecto del coche a partir de 100 o más metros de distancia, regularmente están colocados en la frontal del  vehículo; cámaras, hay una serie de cámaras ópticas que se encargan de detectar señales de tránsito y las marcas que hay en la carretera; lidar se encarga de dibujar el entorno en el que se encuentra el coche, está ubicado en la parte superior de este, gira a razón de 10 rpm y tiene un alcance de 100 metros; Procesadores toda la información captada por los sensores y elementos ya mencionados necesitan ser procesadas de forma rápida para que el vehículo reaccione con la mayor velocidad posible, es por eso que cuentan con 7 o más procesadores de doble núcleo. A demás que muchas compañías de la industria automotriz y tecnológica se han unido para desarrollar la inteligencia de estos vehículos y  asegurar su rentabilidad.

      Gracias a toda la tecnología que los vehículos autónomos albergan, facilitaran la calidad de vida a los usuarios, es para que el usuario se encierre a dormir en el coche y despierte cuando haya llegado a su destino, se podrá aprovechar ese tiempo de recorrido para realizar tareas del trabajo u otra actividad, y el tiempo será menor y el espacio en los estacionamientos se podrá aprovechar al máximo ya que podrán estacionarse en menos espacio.

     Por otro lado el hecho de emplear vehículos autónomos no contribuye precisamente en la seguridad, “Google va por el sueño completo coches totalmente autónomos que, de ser aprobados por los reguladores, ni siquiera llevarán volante o acelerador.”(El financiero, 2016) se necesitaría una persona con licencia el asiento del conductor y un volante en caso de ser necesario, ya que el sistema puede fallar en cualquier momento y para eso tiene que haber alguien que tome el control antes de que termine en accidente, los radares pueden reconocer obstáculos a 100 metros o más, pero, ¿Qué pasaría si el obstáculo se encuentra a menor distancia? ¿Tendría la misma velocidad de reacción?  “En el mes de febrero, un vehículo autónomo que estaba siendo probado por Google chocó contra un autobús, la primera vez que la compañía dijo que su tecnología automática es en parte responsable de un accidente.” (El financiero, 2016). Este artículo menciona que el accidente ocurrió a partir de que el vehículo intento evitar unas bolsas de arena en una calle de Montain view, California; no han pasado accidentes graves en las pruebas que se han realizado, pero no es necesario arriesgarse para que eso suceda, hasta ahora la inteligencia artificial de estos vehículos  no es apta para circular en entornos reales; para que eso suceso se tendría que instalar sensores en las calles y avenidas además un informe de McKinsey asegura que los vehículos autónomos  no alcanzaran una más crítica circulando hasta 2040, ya que la mayoría de la población en este tiempo no tiene acceso a esa tecnología.

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