IMPACTO DE LAS TIC EN LA EDUCACIÓN.

IMPACTO DE LAS TIC EN LA EDUCACIÓN.

ENSAYO

POR

LIC. EN EDUCACION

LUIS MANUEL HERNANDEZ CUELLO

E-MAIL

Luismanuelhernandezcuello1@hotmail.com

CONFERENCISTA

MG.

IVON ROMERO

UNIVERSIDAD SIMON BOLIVAR-SEDE POSGRADO

PROGRAMA MAESTRIA EN EDUCACION-PROMOCION 23

SEMINARIO TIC COMO MEDIACIÓN DIDÁCTICA E INVESTIGATIVA

CONVENIO SECRETARIA DE EDUCACION DEPARTAMENTO DEL MAGDALENA

II SEMESTRE-GRUPO B

BARRANQUILLA-COLOMBIA

2016

Impacto de las TIC en la educación.

Por Lic. Luis Hernandez cuello.

        Hoy en día los medios tecnológicos son recursos esenciales utilizados en diferentes aspectos, en el transcurso de los años la tecnología ha avanzado de forma sorprendente, la globalización de la misma es notoria y constante que ha logrado forjar el camino a diferentes países que se han convertido en potencia mundial, “Sin embargo, estos caminos están marcados por el desigual desarrollo económico a nivel global, por lo que cada análisis que se haga de la influencia de las tecnologías en la comunicación humana, estará condicionado por estos factores” (Molina Gómez et al, 2015, p.483). Los países que cuentan con tecnología de punta son los que generan mucha más economía, la gran preocupación debe ser notoria, sabiendo que en unos cuantos años existirán mucho más cambio y las exigencias serán mayores y con esta la tendencia a hacerse más evidente la brecha digital, (…) en este sentido, Molina Gómez et al, (2015) afirma que “el acceso a las nuevas tecnologías se convierte entonces en el más poderoso símbolo de estatus” (p.485). pues si bien, en los países desarrollados existe toda la infraestructura necesaria para poderse incorporar con relativa facilidad a esta nueva era digital, en los países en vías de desarrollo y subdesarrollados el panorama es muy distinto, la falta de recursos de toda índole, imposibilitan el desarrollo, incorporación y uso de las TIC. Como siempre sucede, los más perjudicados con esta brecha digital, son los países pobres y las personas que menos tienen, es decir, el acceso a este tipo de recursos tiene costos que no puede pagar un número importante de personas en cualquier nación del mundo.

La revolución de las tecnologías de la información y las comunicaciones se remonta al comienzo de los años noventa cuando Internet dejó de ser un instrumento especializado de la comunidad científica, a ser una red al alcance de muchas personas, dando lugar a un tráfico constante de información, que trajo como consecuencia un vertiginoso auge de estas tecnologías y unos avances significativos en la manera de las personas acceder a la información. Como consecuencia de esto surge un nuevo modelo de sociedad, se crean nuevos paradigmas del conocimiento y nuevos estereotipos de familia en donde se evidencia notoriamente una falta de control.

En este contexto entra la educación algo inimaginable en la década de los ochenta, en donde se plantea el uso de la TIC como recurso educativo para potencializar el proceso de enseñanza aprendizaje (…) ya lo manifestaba Prieto Díaz et al (2011) al decir que:

Para ello se precisa del uso eficiente de las TIC como recursos educativos que favorecen la creatividad e independencia de los estudiantes, incrementa el papel orientador del profesor o tutor, a la vez que obliga al estudiante a conocer el manejo de la tecnología y utilizarla en la búsqueda de su propio conocimiento (p.98).

Con la inclusión de las TIC en el campo educativo vienen nuevos retos tanto para el docente como el estudiante, por una parte, docentes anticuados al tratar de comprenderlas y aplicarlas, y por otra parte los estudiantes habidos necesitados de una buena orientación.

Y así, ante estos nuevos retos que se plantean a la educación y a los educadores del siglo XXI, no nos quedará más remedio que hacerles frente, pero no oponiéndonos sino acompañando esos cambios, estimulándolos, ayudando a nuestro alumnado a digerirlos y a que sean capaces de convertir esa información en conocimiento. Por ello, necesariamente, el papel de profesores y profesoras, maestros y maestras debe pasar por una inmersión en las TIC, porque son nuestras pizarras, nuestros libros, nuestras herramientas educativas de este siglo (Muñoz, 2008, p.4)

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