IMPORTANCIA DE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN, Y CONSECUENCIAS DE SU IMPLEMENTACIÓN

IMPORTANCIA DE LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN,  Y CONSECUENCIAS DE SU IMPLEMENTACIÓN

En los últimos 100 años, la humanidad ha logrado avances tecnológicos jamás pensados. Hoy día la tecnología  no es una opción, se trata de  una necesidad  fundamental que le permite a las empresas ser competitivas y estar a la vanguardia de esta era digital.

Desde la antigüedad, hasta el año 2013 se generan 5 billones de exabytes de datos, esa misma cantidad es la que hoy en día se genera cada 10 minutos.

La  información más las herramientas de visualización y almacenamiento, es parte fundamental para cualquier empresa, siendo éste el eje central para la toma de decisiones. La incorporación de tecnología ofrece la posibilidad de expandir su mercado, permanecer en el mercado y ser eficiente.

Para lograr eficiencia es necesario +ingresos –gastos. Enfocarse en sólo reducir gastos puede afectar la generación de ingresos; y obtener mayores ventas y abarcar nuevos mercados sin medir los costos, resulta en un ejercicio ineficiente. El mejor de todos los escenarios es lograr mayores ingresos con gastos controlados y allí es donde la tecnología juega un papel muy importante.

Romper esquemas y adaptabilidad al cambio, es un lenguaje común en las empresas de hoy. Es posible incluso afirmar que no hay eficiencia sin tecnología, y suena lógico cuando el dinamismo de hoy no permite ningún tipo de desperdicio. Ahora, también es viable afirmar que la información sin la tecnología adecuada para su uso, reduce la efectividad esperada.

De lo anterior nace la inquietud de identificar si esta sinergia nos está llevando a un estado de obsolescencia programada, donde todo tiene fecha de caducidad, donde el hoy es pasado y el futuro es ahora. Donde las empresas e inclusive personas que no se suban en este tren que avanza cada vez más rápido, estarán destinadas a quedarse en el olvido.

Según (Rialp-Criado, 2007), las empresas pueden realizar hasta tres usos o aplicaciones estratégicas de las Tecnologías de la información y comunicación, la primera mejorando la eficiencia interna, la segunda mejorando la atención de los clientes actuales (fidelización), y la tercera definiendo nuevos mercados y nuevas oportunidades de negocio. Partiendo de lo anterior, es posible identificar las empresas que no utilizan las TIC de las que si lo hacen, dado que es evidente el impacto en tres aspectos fundamentales: eficiencia, fidelización de clientes y expansión.

Un claro ejemplo es la banca. En sus 147 años, la banca nacional ha atravesado por numerosos cambios y recientemente con mayor notoriedad. Durante este tiempo ha sido una necesidad incorporar la tecnología a su operación, ello con fines de facilitar el manejo de la información y agilizar sus procesos, lo que no ha sido fácil más aún cuando en cuestión de meses nacen nuevas herramientas tecnológicas a la par de la obsolescencia de otras.

Actualmente, la banca ha adoptado y se ha concientizado de la importancia de ser eficientes, por ejemplo, para un banco le es factible ubicar corresponsales bancarios (puntos de atención a clientes ubicados en establecimientos comerciales donde no hay entidad financiera, a través del cual se realizan transacciones y es administrado por el propietario del negocio), que abrir oficinas bancarias. Es común encontrar no solo gerencias de mercadeo y gerencias de canales, ahora hay laboratorios digitales, encargados de fabricar productos y migrar procesos a la banca digital.  

En el sistema financiero Colombiano, en el primer semestre 2017 se realizaron aproximadamente 2.700 millones de transacciones, a través de los siguientes canales: Internet: 45%, cajeros automáticos: 13,9%, oficinas: 11.3%. (Fuente: www.banrep.gov.co).

Las tecnologías de la información y la comunicación, se encuentras implícitas en cualquier empresa. No cabe duda que la humanidad ha cambiado su forma de ver el presente y de esperar el mañana, nos encontramos en una era inmediatista, con acceso a la información en cuestión de minutos, donde los computadores, escritorios y la misma planta física de una empresa ya no es el activo principal, la información es el activo más importante y valioso. De allí nace conceptos como “gobierno y calidad de la información” que tiene como una de sus funciones básicas la implementación de políticas, procesos y desarrollos de grupos de información, lo que facilita entre otras cosas, la adopción de modelos analíticos y predictivos  que generaran mayores beneficios a la empresa en términos de ingresos, costos, riesgos y mejores experiencias para los cliente.

De acuerdo a la Revista Facultad de Ingeniería,(UPTC, Enero-Junio de 2012,Vol. 21, No. 3), el comportamiento consumista, potenciado en la sociedad actual, ha sido aprovechado mediante la implementación de estrategias asociadas a la obsolescencia artificial, de manera que productos y servicios se conviertan en altamente perecederos, aunque funcionalmente puedan tener mayor vida útil. Un efecto del fuerte desarrollo tecnológico y su correspondiente obsolescencia, es el riesgo o de pérdida de información, originado en la rápida evolución de los dispositivos de almacenamiento y en la incompatibilidad de sus mecanismos de recuperación.

La Información y el Conocimiento se afianzan con las estrategias dirigidas a la masificación del acceso a las TIC, mediante la creciente oferta de equipos y servicios centrados en el consumismo y la premisa de la tecnología como fundamento de desarrollo.

Se trata de cambiar la cultura y la manera de hacer las cosas. Las empresas que quieran permanecer, deben implementar tecnologías de información y comunicación, e invertir en ello constantemente. El mercado espera encontrarse con soluciones a un clic, y las empresas deben generar un engranaje perfecto, entre la protección, disponibilidad y precisión de la información.

Pero ajustarse a estos cambios no es del todo fácil y rápido. Sugiere reestructurar todas las áreas de la empresa, e incluye un esfuerzo económico y humano para lograrlo.

La información como activo que tiene valor y que está disponible para el desarrollo de los procesos propios del negocio, requiere trabajo en equipo en todas las áreas, especialmente aquellas que son responsables del ingreso de la información en los sistemas informáticos.

Los avances tecnológicos tienen un efecto peligros, relacionado con  la pérdida de la información, un recurso claramente valioso e imprescindible a través de los tiempos. Lo anterior obliga a establecer acciones y procesos formales y costosos para la conservación de la información, para lo cual no todas las empresas están preparadas.