Proyecto rediseño de una bomba de comprobacion

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ANTECEDENTES DEL PROBLEMA

Las construcciones de viviendas o arquitecturas siempre requieren de servicios de agua.  En las construcciones, la instalación del sistema hidráulico es muy bien diseñada.  Pero existen problemas cuando se ejecuta la instalación de la estructura, obstruyendo los objetivos de la empresa.  Uno de ellos y objeto del tema de investigación es la existencia de fugas de agua.

Estas fugas representan grandes complicaciones para las demás áreas en la construcción y planeación de la arquitectura.  Generan atrasos a la instalación eléctrica, a la estructura, se elevan los costos preestablecidos en el presupuesto, aunque exista un margen de error, el tiempo propuesto no es suficiente y se retrasa la fecha de entrega del proyecto.

El contexto del problema se explica a continuación.  La situación problemática se desarrolla en construcciones de edificios como hoteles o zonas departamentales y viviendas de uno o más pisos.  El material de las tuberías y accesorios usado aquí es de cobre o CPVC, este último se usa más comúnmente.  Después de instalados estos dentro de la edificación, se realizan las pruebas para verificar el sistema.  El conocimiento empírico del personal encargado de la obra hidráulica nos dice que se ha de seguir dos pasos: el primero es una revisión visual de las conexiones y la segunda es una prueba con ayuda de un equipo que consta de mangueras recubiertas con tela de alambre, reducciones, conexiones, válvulas, un manómetro, tapones y tubos, la mayoría en cobre, que es conectada a un tubo de salida abierta.  En el sistema las demás salidas se encuentran cerradas.

El quipo realiza su función usando un principio similar al de las bombas hidráulicas y pozos de extracción, es decir, succiona agua de un depósito y se evita que vuelva a ella gracias a una válvula check. Usando la inercia de la succión esta la envía hacia el sistema.  Gradualmente se producirá un aumento de la presión causada por la inyección de los fluidos (agua y aire) dentro de la tubería.  Posteriormente se frena este proceso hasta llegar a un límite o presión máxima que considere el operario y se mide la presión.  Se deja pasar cierto tiempo, si hay alguna fuga la presión en el sistema provocará que el agua empuje hacia las paredes   inundará los orificios de fuga provocadas por la mala instalación, defectos del material, o algún otro fenómeno desconocido, gracias a la presión existente dentro del sistema.  Obviamente la presión comenzará a disminuir porque el sistema ya no se encuentra cerrado y esto se evidenciará en el manómetro.  Si no existe ninguna fuga la presión se mantendrá estable.

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