Renaya

Usualmente, las luces LED, mejor dicho, cada uno de estos LED ocupa un área menor a 1 mm. Las luces LED presentan muchas ventajas cuando las comparamos con las usuales luces incandescentes, entre dichas ventajas encontramos:

-Un menor consumo de energía.

-Un mayor tiempo de vida.

-Un tamaño menor.

-Una gran durabilidad.

-Una alta fiabilidad.

Si recurrimos a las luces LED para iluminar una habitación entonces nos encontraremos con que son más costosas y requieren una corriente más precisa que las luces comunes y corrientes.

Las aplicaciones de las luces LED son bastante diversas: se usan en iluminación para aviones, para autos, en señales de tránsito, entre otros. Gracias a su tamaño compacto, su rápido entendido y su gran fiabilidad, las luces LED han comenzado a ser usadas en nuevas pantallas, e incluso se usan en tecnologías de comunicación gracias a las altas frecuencias en que son operadas.

1. Larga vida útil, de 35.000 a 100.000 horas. De media, la vida media de una lámpara LED es de 50.000 horas, frente a las 2.000 de una bombilla estándar. Esto son 17 años a 8 horas diarias de utilización.

2. Energía altamente eficiente. Consumen entre un 80 y un 90 por ciento menos que una bombilla corriente de similares características, y con reducciones de hasta un 85 por ciento en los costes energéticos en el caso de las lámparas halógenas.

Con una lámpara de este tipo tendríamos cinco años de luz continuada durante 24 horas al día y 7 días a la semana, frente a los 83 días de la bombilla estándar. ¡Menudo ahorro en la factura eléctrica!

Como no desprenden calor se evita el desperdicio de energía y permite su uso en lugares pequeños y delicados.

3. Amigable con el medio ambiente. Son luces ecológicas, reciclables y cumplen con la normativa europea RoHS de sustancias contaminantes. No contienen tungsteno como las bombillas normales, ni mercurio como la iluminación fluorescente.

Al consumir menos energía, ayudan a reducir la huella de carbono. Además, no emiten luz infrarroja ni ultravioleta.

4. Su precio es elevado, pero es un dinero bien empleado. Gracias a su larga durabilidad no necesitan ningún mantenimiento al no requerir manipulación de las lámparas fundidas. En menos de 10 meses recuperarás la inversión.

ANTECEDENTES

El primer led comercialmente utilizable fue desarrollado en el año 1962, combinando Galio, Arsénico y Fósforo (GaAsP) con lo cual se consiguió un led rojo con una frecuencia de emisión de unos 650 nm con una intensidad relativamente baja, aproximadamente 10 mcd @20mA, (mcd = milicandela, posteriormente explicaremos las unidades fotométricas y radiométricas utilizadas para determinar la intensidad lumínica de los leds). El siguiente desarrollo se basó en el uso del Galio en combinación con el Fósforo (GaP) con lo cual se consiguió una frecuencia de emisión del orden de los 700 nm. A pesar de que se conseguía una eficiencia de conversión electrón- fotón

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