Sistema Solar
Enviado por fiorelly94 • 16 de Septiembre de 2014 • 4.958 Palabras (20 Páginas) • 146 Visitas
INFORME DEL TRABAJO SOBRE EL SISTEMA SOLAR
Como ya explicamos en la Introducción, cuando decidimos hacer un trabajo
para presentar a este concurso, el primer tema que elegimos fue el del Universo;
los cuatro estábamos de acuerdo porque a todos nos gustaba y nos parecía
interesante, pero cuando empezamos a buscar en los libros que teníamos en
casa, nos dimos cuenta de que era algo demasiado amplio. Decidimos, entonces,
centrarnos en el Sistema Solar.
Ahora que ya sabíamos sobre qué trabajar nos dirigimos a las Bibliotecas,
primero a la de nuestro instituto y luego a la pública. En las dos había muchos
libros, pero en algunos el vocabulario que utilizaba era demasiado complicado de
entender así que tuvimos que ir seleccionando y nos quedamos con aquellos que
sí entendíamos.
El siguiente paso fue repartirnos el trabajo y hacer un calendario para
quedar y que cada uno contara lo que había aprendido y qué datos había
tomado; después de las primeras reuniones decidimos trabajar de dos en dos en
alguna casa y luego todos juntos, con la profesora, en el instituto.
Cuando llevábamos varias semanas, pensamos que el que a nosotros nos
gustara el tema no quería decir que le tuviera que gustar a todo el mundo, así que
quisimos comprobarlo, pensamos en muchas preguntas que podríamos hacer a
quien nos quisiera contestar y, de entre todas, seleccionamos quince y salimos a
la calle a hacer encuestas.
Todos fueron muy amables contestándonos, incluso cuando les
preguntábamos la edad. Lo peor vino cuando tuvimos que buscar respuestas
parecidas para agruparlas y poder hacer una estadística que nos permitiera sacar
algunas conclusiones; no quisimos dar opciones a cada pregunta (aunque hubiera
sido más fácil para nosotros) para no dar pistas y que cada uno contestara lo que
de verdad supiera. Esto nos llevó mucho tiempo.
Mucho mejor lo pasamos cuando hicimos la entrevista a nuestro profesor,
cuando estuvimos en el Observatorio y, por supuesto, las veces que fuimos al
laboratorio a realizar las experiencias. Cuando quisimos simular los cráteres
tiramos varios objetos desde una cierta altura y observamos la forma que
quedaba, al día siguiente volvimos y todo estaba igual (lo mismo que en la Luna o
donde no hay atmósfera), entonces pensamos soplar con cuidado desde arriba 2
pero por si nos pasábamos decidimos que era mejor simular el viento moviendo
despacito una revista y así vimos cómo efectivamente las formas, sobre todo en
sus bordes, iban cambiando y se deformaban (como la erosión en la Tierra que sí
tiene atmósfera).
Para la expansión del universo todo iba bien hasta que tuvimos que
repasar los dibujos porque el rotulador que utilizamos era tan fino y tan clarito que
no se apreciaba, utilizamos uno permanente y problema resuelto.
Lo que más nos costó fue simular los eclipses, porque como ya
comentamos en el trabajo conseguir la luz adecuada para que se viera bien y
poner la cámara en la posición correcta no fue fácil; la primera vez que lo
intentamos no nos gustó el resultado y lo tuvimos que repetir.
Está claro que solo con que guste un tema no es suficiente para decir que
se sabe mucho de él, hay que documentarse como hemos hecho nosotros,
buscando información en los libros y en aquellas personas que saben de verdad.
Nos ha costado un poco expresar con nuestras propias palabras algunas ideas
porque cuando las lees tantas veces en diferentes libros, te parece que es que tú
ya lo sabías desde hacía tiempo, pero nos hemos empeñado y lo hemos
conseguido. Internet también nos ha ayudado, pero sobre todo para elegir alguna
imagen que de otro modo no habríamos podido conseguir.
Nuestra bibliografía ha sido esta:
El Sol y nosotros
La humanidad ha sabido siempre que sin el Sol no habría vida en la Tierra, y si bien la ciencia ha despojado al Sol de su carácter mitológico, no ha disminuido nuestra fascinación por él. Cuanto más sabemos, más nos damos cuenta de que nuestro planeta está íntimamente ligado a él de numerosas formas.
La tecnología espacial nos ha proporcionado las herramientas para satisfacer nuestra curiosidad de ampliar las fronteras del conocimiento y así poder extraer todo el potencial de nuestro astro rey en beneficio de la humanidad.
La humanidad ha sabido siempre que sin el Sol no habría vida en la Tierra, y si bien la ciencia ha despojado al Sol de su carácter mitológico, no ha disminuido nuestra fascinación por él. Cuanto más sabemos, más nos damos cuenta de que nuestro planeta está íntimamente ligado a él de numerosas formas.
La tecnología espacial nos ha proporcionado las herramientas para satisfacer nuestra curiosidad de ampliar las fronteras del conocimiento y así poder extraer todo el potencial de nuestro astro rey en beneficio de la humanidad.
1. Introducción
El Sistema Solar es uno de las materias más estudiadas en la historia de la humanidad.
Desde tiempos muy antiguos, el hombre ha manifestado preocupación e interés por conocer su medio, y el Universo no está exento de esa curiosidad y afán de investigación.
Ya en el siglo III A.C. , Aristarco de Samos presentaba la teoría heliocéntrica del origen del Sistema Solar, la que perduró hasta el siglo II, cuando Tolomeo propondría su celebre Teoría Geocéntrica, la que sostenía que la tierra era el centro del Universo. Debieron pasar un par de siglos, para que en el XVI, Nicolás Copérnico propusiera nuevamente la teoría heliocéntrica, la que esta vez sea aceptada universalmente.
Desde entonces, ha habido un gran interés por conocer el sistema solar, investigaciones de las que desprenden grandes teorías, desde la Ley de la Gravitación Universal de Newton hasta cálculos que indican que habrían más de cien mil millones de estrellas en la Vía Láctea, galaxia a la cual pertenece nuestro sistema solar.
Este interés ha llevado al hombre a realizar grandes operaciones, las que han trascendido fronteras, es así como en 1957 se lanza al espacio el Sputnik I, primer vehículo que sales de la órbita terrestre. En 1958, la URSS lanza al espacio un cohete con dos perras: los primeros seres vivientes en salir del globo terrestre. El primer astronauta fue Yuri Gagarin, a bordo del Bostok I. El 18 de marzo de 1965 se realiza el primer paseo espacial: el ruso A. Leonov flotó en
...