A realidad de un cuento: LA META

a realidad de un cuento: LA META

Cuando uno se da cuenta lo que el autor menciona en el libro como LA META de una empresa, lo primero que puede venir a la mente es la obviedad del concepto. Parece difícil creer que alguien tenga en mente una empresa u organización sin pensar en conseguir un beneficio monetario de él. Sencillamente esa es la meta de cualquier organización… GANAR DINERO. No me imagino a alguien decir “Vamos a hacer una organización para divertirnos”. Quizá ese sea el caso de un equipo de fútbol amateur, pero sabemos que la complejidad de una organización, es un esfuerzo que merece los beneficios.

El libro nos habla de un empresario que bien podría ser uno como cualquiera: Alex Rogo tiene la gran encrucijada de hacer a su planta rentable o desaparecerá. Cuando en un mundo como el nuestro establecemos nuestro ritmo, es difícil reaccionar a una tarea como esa. Mejorar de la nada, pensarán algunos. Finalmente es un viejo amigo el que le muestra que la meta es GANAR DINERO, y que todos los elementos que establecen esa meta, están presentes en conceptos que podrían ser extraordinarios, cuya comprensión es tan sólo el fundamento de una verdad presente pero difícil de ver.

Conceptos como throughput, gastos de operación e inventario, se nos presentan como palabras conocidas y aparentemente comprendidas, pero el desarrollo del concepto, más que de la palabra es el hecho primordial que nos muestra este libro de una manera práctica.

Difícilmente podemos hablar del libro como una novela apasionante desde el punto de vista de la narrativa, pero su manejo temático dentro del tema de la administración, se conjuga para hacer una obra diferente. Es una gran diferencia entre verla como una novela práctica o temática, es más bien un texto adaptado a la vida y obra de un hombre cuya responsabilidad depende de su propio desempeño.

La interesante función del libro, integrando los problemas maritales a un problema de trabajo parecería una acción digna de.

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