Actos Administrativos Unilaterales

I. ACTOS ADMINISTRATIVOS UNILATERALES

Los actos administrativos y los actos unilaterales son los actos típicos del derecho administrativo, pues es por conducto de estos que se manifiesta de manera principal el poder especial que tiene la administración en comparación con los poderes de que gozan los particulares. En efecto, mientras en el sector privado predomina el acuerdo de voluntades, en el sector público se impone especialmente la voluntad de la administración declarada en forma unilateral.

Para analizar este tema, se estudiará, por una parte, las etapas del acto administrativo unilateral, y por otra, haremos un estudio detallado de los principales actos de las autoridades administrativas.

Etapas del acto administrativo unilateral

Desde el punto de vista práctico, el acto administrativo unilateral pasa por 3 etapas: su nacimiento, efectos y su desaparición.

1. NACIMIENTO DEL ACTO ADMINISTRATIVO

a.- Requisitos para el nacimiento del acto. La voluntad de la administración se traduce en un acto administrativo y produce efectos jurídicos, como ejercicio de una competencia, cumpliendo ciertos procedimientos y utilizando ciertas formalidades. Estos elementos tienen un valor fundamentalmente práctico y no necesariamente de validez jurídica. Es decir, el acto nace y produce efectos una vez reunidos esos requisitos, así hayan sido cumplidos ilegalmente alguno de ellos, pues hay que recordar que en virtud del principio de presunción de legalidad, los actos se consideran válidos y producen efectos desde el momento en que comienza su vigencia, así se pruebe después que el acto nació viciado y que, por consiguiente, es ilegal.

Lo anterior implica igualmente que existen otros elementos propios del acto administrativo, que hacen parte de su esencia y que, por consiguiente, tienen relación con su validez, pero no constituyen requisitos para su nacimiento, como son los referentes a los motivos y la finalidad, los cuales se estudiaron con las causales de nulidad de los actos de la administración. Es decir, que solo algunos de los elementos esenciales para la validez de los actos administrativos, lo son para el nacimiento o existencia de los mismos.

Ahora bien, como una limitación a la idea de que los actos nacen y producen inmediatamente sus efectos así sean ilegales, la doctrina y la jurisprudencia hablan en algunas ocasiones de los “actos inexistentes”, para referirse a algunos actos cuyo nacimiento es apenas aparente a causa de ciertas irregularidades fundamentales en su formación, aunque en derecho colombiano esta teoría no es aplicable.

A.1) La Competencia. Es la facultad o poder jurídico que tiene una autoridad para ejercer determinada función. Esta facultad es dada por ley y es un requisito de orden público, es decir, que es de estricto cumplimiento, de manera que si no existe, el acto nace, pero viciado de ilegalidad.

La competencia es determinada por 3 elementos diferentes: el elemento material, el elemento territorial y el elemento temporal.

A.1.1. – La competencia “ratione materiae”. Se refiere al objeto de la competencia. Este objeto se traduce en las diferentes funciones que una autoridad puede ejercer legalmente.

A.1.2. – La competencia “ratione loci”. Es la competencia territorial, o sea el territorio dentro del cual

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