Análisis y propuesta a la fabricación y mantenimiento sostenible de las Alfombras

Módulo:                 Normativa Ambiental y Producción Limpia

Facilitador:                Ing. Mariuxy Jaramillo, MSc.

Tema:                        Ensayo – Ciclo de Vida de un Producto - Alfombra

Realizado por:        Miguel Alejandro Báez Alemán

Promoción:                 MDO-VIII-A

Análisis y propuesta a la fabricación y mantenimiento sostenible de las Alfombras

Introducción

La alfombra es un tejido textil, compuesto por urdimbres y tramas (hilos verticales y horizontales respectivamente) que son principalmente de fibras de origen vegetal (algodón) y sobre los cuales se anudan los pelos (de origen animal, principalmente lana de oveja) de distintos colores, los cuales darán las diferentes formas, estilos y diseños en su acabado final (CarpetVista AB, 2017).

Se piensa que su origen es aproximadamente en el año 3000 A.C. en Egipto las cuales se elaboraban con brillantes colores y colocadas en los pisos de sus edificaciones (Advameg Inc., 2017), pero de manera documentada el registro más antiguo de esta pieza es “La alfombra Pazyryk” descubierta en 1947 (Rudenko, 1970) y que registra una antigüedad del año 500 A.C. (Advameg Inc., 2017).

Por su poca capacidad de transferencia de calor  y propiedad aislante (Nieto, Alaniz, & Nieto, 2013), desde los nómadas primitivos hasta la actualidad, su uso principalmente ha sido de tipo decorativo y con afán de protección del frío durante las épocas invernales (CarpetVista AB, 2017).

Su ciclo de vida va desde la obtención de la lana por medio del trasquilado de ovejas, el lavado y peinado de la fibras para posteriormente conformar los hilos, los cuales por medio de un proceso de tinturado tomarán sus diferentes tonalidades y así durante la fase de tejido plasmarán los diseños previamente definidos en función de la necesidad del cliente, uso a darse y desde luego, la tendencia de la moda, para que se usen sobre el piso de las distintas y cotidianas edificaciones en todas partes del mundo, incluso hasta consideradas como piezas de arte, a las cuales se les brinda un mantenimiento durante una vida útil de 10 años, para después ser restauradas o finalmente desechadas (Discovery Communications, 2008).

Actualmente la fabricación de estos telares, ya incluyen fibras sintéticas que han reemplazo al pelo para dar una mayor durabilidad a su uso, lo que ha implicado el desarrollo de sustancias químicas usadas como solventes para su limpieza y mantenimiento (Axminster Carpets, 2017) así como también de tintes a base de cromo para que el color se mantenga por muchos más tiempo, afectando considerablemente a los cuidados de exposiciones durante su manufactura, así como la disposición final del producto, al ser en su mayor conformado por productos no reciclables.

Cuerpo Principal

Como parte de la preparación para la elaboración de la preparación de este documento, se investigaron varias fuentes y conocer más allá de los usos (y posibles sustitutos) del uso de las alfombras, tan solo teniendo como reconocimiento que el mismo es un artículo decorativo, con algún tipo de uso como aislante y para mantener abrigo en los hogares, así como también usada como una palabra para motivar nuevas ideas y conceptos en una sesión de “brainstorming” como modificador y alterador de los conceptos que surgen durante la misma (Schnarch, 2014), la alfombra es un objeto de uso cotidiano y universal, en donde el poder sugerir una alternativa a su uso sugeriría aplicaciones menos sostenibles tanto en su origen, fabricación y disposición final, versus su concepto original.

En la actualidad la lana, ha sido reemplazada por fibras sintéticas, como parte de medidas económicas para dar mayor rendimiento y rentabilidad a esta industria (Bealer, 2017) y cambiando notablemente su ciclo de vida, ya que el diseño original al ser en su gran composición de tipo orgánico, nos permitía tan solo el dar una búsqueda más sencilla a generar un ciclo cerrado dentro del proceso productivo, porque este era degradable. Con esta introducción ahora debemos concentrarnos en cómo daremos disposición final a este producto sintético, para lo cual la tendencia de moda actual con una conciencia más verde en su pronóstico de consumo ha promovido que si la industria de las alfombras desea perdurar en el tiempo, deberá promover el uso de fibras recicladas entre sus componentes o en su defecto, esta tenga un programa de disposición final o reciclaje desarrollado por su fabricante (Bealer, 2017), generando una conciencia sostenible en su ciclo de vida, permitiendo un proceso productivo cerrado si es que las viejas alfombras, pasan constituirse en fibras para una nueva.

Dentro de este camino que hemos tomado, también me ha llamado la atención del mantenimiento de las alfombras, las cuales se lo puede hacer mediante lavado en seco, en donde esto solo es el nombre, porque de verdad es un proceso químico con el uso de diferentes solventes (Morales, 2013). El más conocido de estos productos es el Solvente Stoddard, que si bien en sus estudios no es considerado como un cancerígeno este si se encuentra asociado a enfermedades respiratorias crónicas (ATSDR, 2017), dada esta situación y con el afán de las empresas que se dedican al mantenimiento de alfombras por obtener Certificaciones a sus servicios, han promovido en sus procesos el lavado húmedo de las alfombras, ante lo cual primero garantizan que todos sus productos tengan una etiqueta verde, como la de la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos, llamada “Safer Choice”, la cual ayuda al consumidor encontrar productos químicos seguros, de calidad y alto rendimiento (EPA, 2017), cumplido este objetivo estas empresas alcanzan sus Certificaciones como la de la Asthama and Allegy Foundation of America, que se otorga a aquellos servicios que ayudan a disminuir la incidencia o criticidad de factores que atentan contra las vías respiratorias (AAFA, 2017), de esta manera ya no solo nos concentramos en la búsqueda de una alternativa a las alfombras, sino más bien que la prolongación de su vida útil se lo realice de una manera sostenible, con instituciones que obtengas Sellos y Certificaciones en sus procesos, y garanticen que son amigables al ambiente.

Finalmente, dentro de las consultas realizadas, pude hallar que tener ahora fibras sintéticas en la fabricación de alfombras, así como procesos de mantenimientos exhaustivos para su cuidado, llama mi atención, el cómo se debería llevar de una manera sostenible los productos usados para el tinturado de las fibras, y que sin ellas, estas piezas no podrían ser consideradas como decorativas (o incluso de arte) (Alfaro, 2008) y las cuales durante el proceso de manufactura, si no son tratadas respectivamente, estas vienen a tinturar las vertientes cercanas a las fábricas donde son empleadas. Para esto se identificó que actualmente existen tintas textiles amigables con el ambiente (Solunaris GmbH, 2017) y que a su vez promovieron la creación de entidades que aseguran la condición orgánica de los productos textiles (GOTS, 2017) o sistemas de gestión que estandarizan y verifican los procesos de las industrias textiles sostenibles (OEKO TEX, 2017), generando satisfacción en cuanto, si al menos es muy difícil encontrar un sustituto más sostenible, su industria se encuentra desarrollada y ha buscado alternativas para tener un proceso productivo cerrado desde su fabricación, mantenimiento y disposición final, es decir, la industria de las alfombras pueden ser sostenibles desde “la cuna a la tumba”.

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