Analisis De La Naranja Mecanica

ANALISIS DE LA PELICULA LA NARANJA MECANICA

Es la primera vez que tengo el gusto de ver esta película y me parece fenomenal. El observa al mundo y a su entorno como, placer y satisfacción personal a costa de lo que sea, muestra un adulto que no ha superado su etapa de ego total, incapaz de controlar impulsos, la forma de llamar la atención de la sociedad es precisamente violentando, no haciendo caso de suplicas ni del dolor de las demás personas. Melómano y además completamente violento, que junto a sus compañeros disfruta de la agresión física, sexual y psicológica de sus desafortunadas víctimas.

Sus amigos tentativamente si es que los podemos llamar así, no son más que gente desubicada socialmente que no encajan en ningún círculo social, más que en el delictivo, trasladan todo lo negativo hacia las personas que no tienen culpa de sus problemas existenciales. Los jóvenes, hasta cierto punto, se integran a ciertos grupos sociales para sentirse parte de algo, para compartir gustos y ratos agradables con otros de su mismo rango de edad. Tal vez por esa angustia que caracteriza a los jóvenes, un sentimiento de insatisfacción e incomprensión, están viviendo un momento decisivo de su vida, dejan atrás la niñez y deben abrir las puertas de la adultez. Un periodo intermedio lleno de altibajos y desarrollo hormonal que los hace ser en muchas ocasiones, “las ovejas negras” de la sociedad.

Lo más importante de esta película, es el uso de una técnica psicológica para cambiar un comportamiento de un ser humano. Un tratamiento basado en el condicionamiento clásico. Tratamiento que consiste en equiparar un estímulo incondicionado: una droga que produce vómitos; con un estímulo condicionado como lo son una serie de imágenes sexuales y de violencia, con el propósito de que mediante la repetición de esta equiparación: presentación simultánea de la droga con las imágenes, el individuo consiga responder a las imágenes de la misma forma como con la que responde a la droga, como lo es ese malestar físico. En definitiva, la presentación del estímulo condicionado, las imágenes, y la música asociada a ellas, le provoca esa respuesta condicionada como ese malestar físico.

A el protagonista no lo rehabilitan, ni lo reeducan, ni lo reforman, ni lo reinsertan en la sociedad, sino que lo dejan abandonado a su suerte e indefenso dentro de un entorno vengativo que le pasa cumplida factura por sus pecados y excesos del pasado: los indiferentes e insolidarios padres que lo rechazan, los antiguos compañeros de fechorías convertidos en policías, el vagabundo apaleado, el escritor lisiado que acaba por reconocerle y obligarle al suicidio... Todo lo anterior describe al protagonista, con una personalidad disocial y unos pensamientos perversos, que después de ser sometido a un método de condicionamiento clásico pasa a ser un ser humano sin libertad, ni poder de elección, ni cómo

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