Ateismo

Ateísmo

El ateísmo es una temática muy profunda y para su comprensión, la Enciclopedia Católica comienza explicando los orígenes del término, el cual deriva de los vocablos griegos “a” privativo, y “theos”: Dios. O sea, “sin Dios”. Es decir, que el ateísmo es ese sistema de pensamiento que formalmente se opone al teísmo.

El uso del término ateísmo no es nuevo, puesto que existen episodios históricos que describen la acusación contra cualquiera que dudara de las deidades populares del momento, así por ejemplo, Sócrates fue acusado de ateísmo y Diágoras fue llamado ateo por Cicerón, Demócrito y Epicuro fueron llamados “impíos”, con el mismo sentido (irrespetuosos con los dioses) a causa de la tendencia de su nueva filosofía atomista. Incluso los cristianos fueron tildados de ateos por los paganos porque rechazaban a los dioses paganos. Y de tiempo en tiempo algunos sistemas religiosos y filosóficos han sido considerados ateos por semejantes razones.

El ateísmo, visto en su aspecto histórico, no ha significado nada más en la antigua negación crítica o escéptica de la teología de quienes han usado el término como reproche pero considerado en su significado más amplio, es un término opuesto al teísmo que permite enmarcar todas las clasificaciones de sistemas que sean necesarias dentro de ese concepto. Al hacerlo así estaremos adoptando simultáneamente tanto la perspectiva filosófica como la histórica. Esto, debido a que el común denominador de todos los sistemas teístas y que el punto central de toda religión popular hoy día es sin duda la creencia en la existencia de un dios personal. Negar este fundamento es suscitar el reproche popular del ateísmo.

Por otro lado, si el término se utiliza de esa manera, como la contra distinción estricta del teísmo, y se planean los distintos modos en que puede ser aceptado, estos sistemas de pensamiento aparecerán naturalmente en una proporción y una relación más claras.

El ateísmo, entonces, definido como una doctrina, o teoría, o filosofía formalmente opuesta al teísmo, sólo puede referirse a la enseñanza de esas escuelas, cosmológicas o morales, que excluyen a Dios como principio o conclusión de su racionamiento.

Pero tal definición de ateo no es bien tomada por los practicantes de dicha doctrina y así lo hacen notar en la carta a los ateos, en donde explican que el término ateo no es más que un término que los integrantes de diversas religiones o sectas lo utilizan peyorativamente con el objeto de ridiculizar, burlarse, traumar, etc a los que no tienen necesidad de creer en entidades semi naturales o sobrenaturales como dioses, diosas, ángeles ,arcángeles, diablos, espíritus santos o no, duendes, o lugares inventados como paraísos, cielos, purgatorios, infiernos, etc.

En la carta a los ateos, los practicantes del ateísmo explican que fue la iglesia la que "inventó"

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